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viernes, 19 de julio de 2019

EL SILLÓN DEL PSIQUIATRA


Pablo Iglesias no ha aprendido nada ni siquiera de Alexis Tsipras, líder de la coalición de izquierda radical griega, que ha sido primer ministro de su país hasta hace dos telediarios y que supo representar la imagen que la sociedad fáctica helena exigía, incluso a sus revolucionarios.
Si se hubiese cortado hace tiempo la coleta y en vez de ir con las mangas de la camisa remangadas a las consultas con el Jefe del estado hubiese llevado un discreto traje de Zara, como hace Rufián , a estas horas no estaría lampando por conseguir un sillón en el consejo de ministros del futuro gobierno socialista.
Yo creo que esto le sucede porque se ha equivocado de continente geográfico y creyó que le bastaba una guayabera para ser Daniel Ortega, pero en la Europa de los mercaderes, de los lobies, de las viejas tradiciones y de las toleradas creencias de los poderosos incrédulos, no basta con comprarse un chalė en Galapagar para entrar en el selecto club de los poderosos.
Por eso el drama que está viviendo estos días sin ningún pudor, es una experiencia que deja una huella indeleble que no la curan ni Freud, ni Adler ni Joung de sus mejores tiempos.
El que más y el que menos ha sido rechazado alguna vez por una amante deseada, y en esos casos lo más inteligente, aunque no sea lo que te pida el alma y el cuerpo, es tomar las de Villadiego y refugiarte en lugar protegido de acosos, choteos y maledicencias. Pero los hay empecinados que carecen de una dosis elemental de dignidad o sentido común y exhiben sus vergüenzas en la plaza pública.
Iglesias , sumido en un magma de incomprensión, se está enfrentando al absurdo de quien daría un brazo porque en su curriculum algún día figurase una línea en la que ponga “fue vicepresidente del gobierno”.
Podría haberlo sido todo, o casi todo, de haber aprendido a tiempo que España no es Nicaragua, Cuba o Venezuela, por citar tres paises donde no se exige a sus gobernantes que sean demócratas o que respeten a los opositores y no les den habitación y comida gratis en un penal.
El jefe de Podemos tiene frente a sí a un verdadero profesional de la política , a un killer acostumbrado a cavar la tumba de sus enemigos de partido y echarles paladas de tierra antes de que exhalen su último suspiro.
Iglesias ha creido que sus enemigos estaban en la derecha , cuando en verdad su verdugo se movía en la indefinición ideológica y el oportunismo. Por eso le auguro un futuro político de horizonte cercano, sin que eso signifique que vaya a desaparecer del mapa político español la izquierda que él representó y que ahora han heredado otros tan fundamentalistas como él pero… más hábiles .

lunes, 21 de septiembre de 2015

Alexis Tsipras y Pablo Iglesias se echan unas risas junto a los cerdos de la Granja Animal

Tras timar a los griegos dos veces, Syriza logra que se dejen timar una vez más

Alexis Tsipras y Pablo Iglesias se echan unas risas junto a los cerdos de la Granja Animal

   
Hace muchos años, estando aún en el colegio, leí “Rebelión en la granja”, novela con la que el izquierdista George Orwell pretendía denunciar la traición del estalinismo al genuino comunismo.
La ultraizquierda no pide consultar a los españoles sobre el tercer rescate a Grecia
Los de “el miedo va a cambiar de bando” provocan que los ahorros huyan del banco
Una novela alegórica sobre cerdos bolcheviques
Usando una alegoría, Orwell sostenía que los ideales de la revolución bolchevique, representada por la rebelión de los animales de la Granja Manor, habían sido traicionados por Stalin y sus acólitos. En la novela los cerdos toman la iniciativa de la rebelión por ser los más inteligentes de los animales. Eran los guías de la rebelión y los que asumían el liderazgo de los demás. En la novela los cerdos eran el Partido Comunista. Entre ellos Orwell hacía distinciones. Había dos cerdos a los que presentaba como justos: Mayor, el más viejo, representaba a Lenin, y Snowball a Trotski, que acababa exiliado por instigación del cerdo Napoleón, que hacía el papel de Stalin. El célebre poeta T.S. Eliot rechazó la novela de Orwell por su orientación trotskista, y no le faltaba razón. El tiempo acabaría mostrando a todo el mundo que los crímenes y la opresión del comunismo no fueron una corrupción de sus esencias ideológicas, sino el desarrollo lógico de sus tesis materialistas y totalitarias. De hecho, los crímenes soviéticos empezaron ya con Lenin, desatando hambrunas que dejaron millones de muertos, con la intención de someter a la población. El cerdo Mayor era, en el mundo real, un genocida, y Snowball era uno de sus principales cómplices.
El “capitalismo de Estado”: tapando las miserias del comunismo
La novela acaba con los animales de la granja viendo una escena insólita: media docena de miembros de la casta dirigente de los cerdos, con Napoleón a la cabeza, celebran una cena con media docena de granjeros -los humanos eran los enemigos-, riendo y cantando. En esa cena los cerdos se vanaglorian de tener la propiedad de la granja animal, en la que los demás animales han acabado siendo mucho más explotados que con su antiguo propietario humano, pero acallando toda protesta. Orwell conecta con la idea de que el comunismo soviético degeneró en un capitalismo de Estado, una tesis que muchos comunistas han sostenido tras la caída del Muro de Berlín, como una cínica forma de atribuir al capitalismo los errores y vilezas del comunismo. Hay que tener en cuenta que el capitalismo implica la existencia de propiedad privada, y en el comunismo ese derecho brilla por su ausencia. En el Estado soviético los medios de producción eran propiedad del Estado. Ni siquiera las viviendas eran de las personas o de las familias que las habitaban, sino una propiedad del Estado que se asignaba siguiendo determinados criterios, entre los que no figuraba que la vivienda fuese de tu gusto o de tu elección. Aún en septiembre de 1989 la URSS se resistía a admitir la propiedad privada, sólo un par de meses antes de la caída del Muro de Berlín y un par de años antes del derrumbe del Estado soviético. Bajo el comunismo el trabajador ni siquiera era dueño de su fuerza de trabajo. El economista Vasili Seliunin, convencido anticomunista y una de las más destacadas voces críticas de la URSS en los años de la Glasnost, criticaba esa apropiación del trabajo en estos términos: “No se permite que la fuerza de trabajo se convierta en objeto y sea una propiedad individual del trabajador, que ha sido así expropiado de su fuerza de trabajo.”
Dos comunistas que se felicitan por el nuevo éxito de un engaño masivo
Estas consideraciones sobre el comunismo son necesarias para abordar una de las noticias que dejó el día de ayer: el comunista Alexis Tsipras ha vuelto a ganar las elecciones en Grecia. Desde España otro comunista, Pablo Iglesias, se ha apresurado a felicitarle por lo que considera “la victoria del pueblo griego”. Leyendo esto uno se queda tan extrañado como los habitantes de la Granja Animal al ver los cambios de consignas que ordenaba la casta porcina. El problema de muchos de esos animales es que tenían mala memoria. Yo no. Recapitulemos.
Tsipras ganó las elecciones griegas del 25 de enero, valiéndose de una serie de propuestas entre las que se incluían la reestructuración de la deuda, el aumento del gasto público, la subida de los impuestos, la nacionalización de bancos y empresas, la subida del salario mínimo y de las pensiones y una mayor rigidez en el mercado laboral. Teniendo en cuenta la precaria situación de las cuentas públicas griegas y en especial su enorme endeudamiento a causa de políticas como las prometidas por Tsipras, las propuestas de Syriza eran claramente irrealizables pues tendrían un coste astronómico que Grecia no tenía como financiar. La victoria de Syriza no fue, como dijeron algunos, una victoria del pueblo griego o una derrota de las políticas de austeridad. Antes bien, esa victoria de Syriza fue el triunfo de un engaño masivo que pronto se vino abajo. Como cabía esperar, Tsipras no pudo desarrollar sus irreales proyectos porque no había forma de financiarlos. Pero lejos de contribuir a mejorar la situación griega, las propuestas radicales de Syriza desataron el pánico y hundieron la solvencia de Grecia hasta mínimos históricos. ¿Qué insensato presta dinero para hacer fantasiosos proyectos a un gobierno que se niega a reconocer sus deudas?
Syriza, o cómo rematar del todo a un país con serios problemas
Siguiendo los consejos de su estrafalario ministro de Finanzas, Yanis Varufakis, Tsipras convocó un referéndum a modo de órdago contra la Unión Europea. Pretendía consultar a los griegos, una vez expirado el plazo de pago, si eran partidarios de asumir el pago de sus deudas. Desde Podemos defendieron esta pantomima como la panacea de la democracia, como si lo democrático fuese decir a tus deudores que vas a hacer una consulta para decidir si les pagas lo que les debes. Para colmo, Tsipras anunciaba que respetarían los resultados de la consulta “sean cuales sean”, pero que no los llevarían a cabo si triunfaba el “sí”. Es decir, que sólo haría lo que le ordenara el pueblo si era lo que le apetecía hacer. Toma democracia. La pérdida de solvencia que esto suponía para Grecia era enorme y tenía unas consecuencias inevitables. A finales de junio Grecia estaba con un pie fuera del euro y con la gente haciendo colas en los cajeros para recuperar sus ahorros: el país acabó en un corralito bancario, con una pérdida colosal de capitales y con los ciudadanos incapaces de acceder a sus ahorros y pensiones. Con sus políticas radicales Syriza acabó por hundir el país, dañando gravemente a su sistema bancario y a su tejido empresarial, con una enorme destrucción de empleos. Obligado por los acontecimientos provocados por su propia irresponsabilidad, y tras haber rechazado los dos rescates previos a Grecia, Tsipras acabó pasando por el aro de la UE para pedir un tercer rescate, aceptando unas medidas de las que abominan Pablo Iglesias y Podemos en España: reforma de las pensiones, elevar la edad de jubilación a los 67 años; eliminación de subsidios a agricultores; privatización de empresas públicas; subida del IVA; flexibilización del mercado laboral y liberalización del sector de los servicios. Es decir, que Tsipras, que dijo que no obedecería el referéndum si ganaba el “sí”, acabó desobedeciéndolo tras la victoria del “no” a la deuda, la opción que él mismo apoyó. ¿Y qué hizo Podemos? Pues Pablo Iglesias salió en apoyo de Tsipras a pesar de hacer lo contrario de lo que prometió a su pueblo.
Tsipras decidió probar si le funcionaba otra vez más el timo…
Así pues, tenemos una Grecia que es el resultado de décadas de despilfarro público, de un sistema de pensiones públicas insostenible, de un desmesurado peso del sector público sobre la economía y de un endeudamiento estatal que ha acabado haciéndose insoportable para el país. Grecia es la mejor demostración de la ruina que generan las políticas socialistas, tanto las aplicadas por el PASOK como por los conservadores de Nueva Democracia (en este aspecto Grecia se parece mucho a España, pues aquí la derecha parlamentaria también ha asumido los disparates económicos de la izquierda: más impuestos, más gasto público, más deuda pública…). Pero además Grecia demuestra también que las recetas populistas de la ultraizquierda, lejos de mejorar la situación, la agravan y mucho. Para que Grecia prospere necesita sanear su economía y aligerar el insoportable peso del Estado. Tsipras se ha limitado en estas elecciones a prometer que intentará mejorar las condiciones del rescate, condiciones que él mismo aceptó y que aprobó el Parlamento griego. A estas alturas los griegos no tenían ningún motivo para confiar en un mentiroso que traicionó sus irrealizables promesas electorales y su compromiso sobre el referéndum que él mismo convocó, y al mismo tiempo, los acreedores de Grecia ven como el trilero de Syriza insiste en regatear el cumplimiento de unas condiciones que ya había aceptado.
… y los griegos se dejaron timar de nuevo
Sin embargo, en una demostración más de que la opinión de la mayoría no siempre está del lado de la razón ni de la sensatez, los griegos se dejaron engañar ayer, una vez más, por ese timador. Si te mienten una vez la culpa es de quien te engaña, pero si te mienten dos veces, la culpa es tuya por fiarte de un mentiroso. Cierto es que las elecciones de ayer estuvieron marcadas por una alta abstención (el 45,5%), pero el hecho es que Syriza ha vuelto a ganar tras engañar a los griegos dos veces. Que Podemos llame a esto la “victoria del pueblo” me parece de chiste. Ya me imagino a Tsipras e Iglesias echándose unas risas, sentados a la mesa de los mismos políticos europeos que han aceptado llevar a cabo un tercer rescate a Grecia a costa de nuestro dinero, y sabiendo ya que la palabra de Tsipras no vale nada. A la casta porcina de Alexis Tsipras y de Pablo Iglesias el triunfo del engaño de Syriza le permite prolongar su verdadera hoja de ruta: generar inestabilidad, desesperación y miseria, que es el único escenario en el que los charlatanes del populismo pueden obtener la atención y el apoyo de millones de incautos. Pero hay algo más. En su escena final Orwell presentaba como indistinguibles a los cerdos estalinistas y a los granjeros capitalistas. Y en algo coincide esto con la cena que podrían mantener Tsipras, Iglesias, sus amigos porcinos y los políticos de la UE: tanto la izquierda populista como la clase dirigente europea, al menos la asentada en el consenso socialdemócrata (que es la mayoría), pretenden que los ciudadanos dependamos del Estado en mayor o menor medida, pero desde luego ambos sitúan esa medida muy por encima de lo que sería deseable en una sociedad libre y que no quiera verse sometida a los caprichos de una clase política instalada en el intervencionismo salvaje. Una clase política que cada vez se parece más a los cerdos de la Granja Animal.

lunes, 14 de septiembre de 2015

La vida frugal y las contradicciones de Tsipras

 

Contra los principios de su partido, veraneó en una villa de lujo, enchufó a su mujer en la universidad y lleva a sus hijos a colegios privados, a razón de 16.000 euros al año

 
Alexis Tsipras, el presidente del primer gobierno de izquierdas de Grecia, prometió y se comprometió a muchas cosas. Días antes de su victoria electoral del 25 de enero, afirmó que no formaría gobierno con partidos de derecha. El 26 anunciaba su gobierno de coalición con un partido nacionalista de derecha.
Igualmente había prometido una vida frugal cuando estuviera en el gobierno, así como el que perseguiría la evasión fiscal y que serían los ricos, y no el pueblo, los que pagarían mas impuestos en vez de recortar salarios y pensiones.
Pero estos meses en el gobierno han hecho que toda la atención de los medios griegos estén sobre el Gobierno y sobre la familia del ex primer ministro.
Así se ha sabido ahora que durante este dramático verano en el que además de una ola de calor sofocante los griegos han visto cerrarse sus bancos, realizarse un referendo y terminar una truculenta negociación, el ex primer ministro parecía que estaba trabajando todos los días.
Sin embargo durante mas de un mes su familia (su compañera Betty y sus dos hijos pequeños) estaban instalados en una lujosa casa de verano al borde del mar alquilada y pagada por un rico empresario a casi una hora de Atenas por carretera. Alexis se reunía con ellos todos los días y hubo veces, con mucha prisa, en que un helicóptero de la armada le llevó en pocos minutos hasta su despacho presidencial, evitándole el largo trayecto de carretera.
Días antes de la dimisión del gobierno y por orden personal suya, los ministros competentes firmaron la contratación de su compañera como profesora de informática en la Politécnica de Atenas, en un momento en el que este tipo de nombramientos están congelados. Una acción proveniente de un político que denuncia desde el parlamento el enchufismo y el clientismo de los gobiernos anteriores.
Y ahora los dominicales han mostrado las fotos de Betty en el patio de uno de los colegios de primaria privados mas elitistas de Atenas, dónde su hijo mayor (Fívos Páblos), de cinco años, comienza la primaria codeándose con hijos de armadores y otras familias pudientes del país.
Su hijo pequeño Orfeas Ernesto, nacido en 2012, acude ahora a un parvulario, también privado y elitista. El precio total del año escolar para los dos niños alcanza los 16.000 euros, una cantidad muy imporante que equivale a un salario medio griego en este momento. Y Syriza es el partido que mas insiste en la educación estatal para todos los griegos, la misma que ha seguido el propio Tsipras, que estudió en un instituto de su barrio y luego en la Politécnica de Atenas, tambien gratis.

jueves, 27 de agosto de 2015

Podemos no acalla a sus díscolos: un eurodiputado acusa a Tsipras de «abandonar» Syriza


Miguel Urbán arremete contra la «irresponsabilidad» del primer ministro griego días después de que Iglesias asegurara que la postura oficial del partido era apoyarlo con firmeza


Dos días después de que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, estableciera frente a los micrófonos de la prensa que la postura oficial de su partido era apoyar con firmeza al primer ministro griego, las voces díscolas y críticas con las decisiones de Alexis Tsipras continúan imparables.
Este miércoles ha sido el turno del eurodiputado de Podemos y cofundador del partido Miguel Urbán, perteneciente al movimiento Anticapitalistas y habitualmente uno de los más críticos dentro de la formación.
Urbán arremete en su blog contra Tsipras por «claudicar» ante la Troika aceptando el tercer rescate a Grecia, «el humillante armisticio de una guerra económica de la que el pueblo griego sigue siendo la principal víctima». El eurodiputado critica, además, que el líder de Syriza «impusiera» el acuerdo «sin un debate a fondo en las filas de su propio partido» y lo acusa de «propiciar de forma indirecta la ruptura del proyecto de Syriza como la principal fuerza anti-austeridad en Europa». Urbán insiste en que la estrategia de Tsipras es «equivocada e incompleta» y lo ve responsable de «dilapidar toda la fuerza democrática de su pueblo» al no materializar el resultado del referendum en decisiones y planes concretos.
El paralelismo entre los postulados antiausteridad defendidos por Syriza y los que sostiene Podemos hacía inevitable preguntarse si el fracaso del Gobierno griego debiera presentarse como un fracaso futuro para un posible gobierno morado en España. Urbán se detiene en este punto y asegura que la claudicación de Tsipras, apoyada y alabada por Iglesias como un gesto de «valentía y responsabilidad», «bloquea la esperanza, demuestra que, al final, todos son iguales y que no hay alternativa a lo existente». «Es un pésimo precedente para cualquier otro pueblo que decidiese desafiar el poder establecido en el marco de esta Unión Europea», precisamente lo que espera hacer Podemos, advierte Urbán.
Como Urbán, muchos miembros de Podemos difieren de la postura de su líder, que ya a medidados de julio reconocía en la presentación de un libro que, a su juicio, «lo que hizo el Gobierno griego es tristemente lo único que podía hacer». El eurodiputado y cofundador del partido cree que «sí hubo alternativa, tanto en la estrategia de negociación como en la política económica a seguir». Y añade, en lo que parece una advertencia a los suyos: «Esta es una valiosa lección que nos deja la 'tragedia griega'».
Los miembros del ahora movimiento Izquierda Anticapitalista, antes un partido que decidió disolverse para integrarse en la formación morada y al que pertenece Miguel Urbán, ya habían defendido en declaraciones a ABC que son las decisiones de Tsipras las que han «desencadenado la ruptura» en Syriza. «Firmar el tercer rescate supuso incumplir el programa con el que ganó las elecciones del 25 de enero», y criticaron además «que no se debatiera esa decisión dentro del partido». Es este un reproche que repetidas veces han proferido contra la dirección de su propia formación política, con Iglesias a la cabeza.
Urbán insiste en su artículo en este punto y considera una «irresponsabilidad» que Tsipras no «desee escuchar a su partido». Y vuelve a poner el foco en lo que pueda ocurrirle a Podemos en España: «Aceptar algo así [el rescate] supone el fin de cualquier atisbo de soberanía popular, la muerte de la democracia en Grecia y un escenario de desmoralización que trasciende las fronteras helenas».

viernes, 10 de julio de 2015

Las propuestas del Gobierno de Tsipras para reflotar Grecia

El contenido es muy similar al que le propuso la propia troika
 
Grecia ha presentado el paquete de medidas con el que espera, por fin, cerrar un acuerdo con las instituciones que le permita acceder a un tercer rescate. Con un contenido muy similar al que le propuso la propia troika hace solo una semana, Atenas acaba tocando sus líneas rojas: las pensiones, el gasto en Defensa y el IVA, y además ofrece nuevos ajustes como un alza en los impuestos a las empresas navieras y el fin de las exenciones fiscales a sus islas. El Eurogrupo dará hoy su veredicto sobre este plan.

Además del borrador con las medidas, el primer ministro heleno ha remitido una carta al presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, el presidente del BCE, Mario Draghi, y la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, en la que indica que la intención del Ejecutivo heleno es "confirmar su compromiso con el cumplimiento de reformas que aseguren la permanencia de Grecia permanezca como miembro de la eurozona y salga de la crisis".
Lo que no recoge el texto presentado hoy es mención alguna a la reestructuración de la deuda, como pedía el Ejecutivo heleno. De acuerdo con los cálculos que hizo públicos hace unos días el Fondo Monetario Internacional (FMI), cuyos técnicos determinaron que Grecia necesitará más de 50.000 millones de euros en financiación entre octubre de 2015 y finales de 2018, aunque hoy el economista jefe del FMI, Olivier Blanchard, ha reconocido que las necesidades de financiación podrían ser mayores.
Con el plan sobre la mesa de la antigua troika, el grupo parlamentario de Syriza se reúne a primera hora de hoy para tratar las reformas y horas después habrá una sesión extraordinaria del Parlamento heleno para debatir la propuesta y otorgar al primer ministro, Alexis Tsipras, el mandato de negociar con los acreedores.
Además, a las 13:00 hay prevista una teleconferencia entre el presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker; el del Banco Central Europeo, Mario Draghi; la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde; y el jefe de ministros del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem para abordar la última propuesta de reformas griega.

Las medidas clave

¿Pero qué es lo que ofrece el Gobierno griego? Para empezar, contempla una reforma del sistema de pensiones y del impuesto sobre el valor añadido (IVA). El Ejecutivo de Alexis Tsipras se compromete a ahorrar del sistema de pensiones entre un 0,25% y un 0,5% del PIB durante 2015 y un 1% a partir de 2016.
- IVA: Elevará el IVA de la restauración y el catering del 13% actual hasta el 23% y reducirá la tarifa mínima del 6,5% al 6% para medicamentos, libros y teatro. Además, se fija un IVA del 13% para alimentos básicos, hoteles, energía y agua, y del 23% para el resto de bienes y servicios. 
En las islas del mar Egeo que ahora gozan de un descuento del 30% sobre las tarifas del IVA, se eliminará a partir de octubre de 2015 en las islas más ricas y con mayor afluencia de turistas y se exceptuará a las islas más remotas. Este proceso se completará a finales de 2016 con medidas fiscales para compensar a los habitantes con mayores necesidades y recoge que la nueva tasa de IVA para los hoteles se implementará a partir de octubre de 2015.
El plan recoge también una subida del 26% al 28% del impuesto empresarial, al tiempo que señala que la nueva ley que regule los convenios colectivos debería estar lista para el último trimestre del año. También aumentará el impuesto a las compañías navieras y aplicará de forma inmediata un impuesto sobre los anuncios en televisión.
- Lujo: El gravamen que se aplica a los artículos de lujo, al margen del IVA, se ha aumentado hasta el 13%, desde el 10% anterior con efecto retroactivo para la declaración de 2014. Además será aplicable a partir de ahora también a las embarcaciones con una eslora mínima de 5 metros.
- Pensiones: En materia de pensiones, el texto recoge una penalización de las jubilaciones anticipadas y aumento progresivo hasta 2022 de la edad de jubilación a los 67 años o a un mínimo de 62 años con cuarenta de trabajo cotizado. Asimismo aumenta las cotizaciones de los pensionistas al sistema de sanitario del 4% al 6% y establece la supresión del subsidio para las pensiones más bajas (EKAS) a finales de 2020, para cuando se prevé la creación de otras ayudas.
También se irán eliminando las pensiones complementarias gradualmente hasta diciembre de 2019. A su vez, la cláusula de déficit cero sobre las pensiones será suspendida hasta octubre, cuando se presentará una nueva reforma.
- Privatizaciones: Además, facilitará que se complete el proceso de privatización de los aeropuertos regionales, así como los puertos del Pireo, Tesalónica y Hellinikon. La fecha para la licitación de cara a las privatizaciones de los puertos se fijará antes de octubre de este año. Por otra parte, el Estado transferirá las acciones que mantiene en la empresa de telecomunicaciones OTE a la agencia de privatizaciones.
- Defensa: En lo que se refiere al gasto en Defensa, el Gobierno de Tsipras se compromete a recortarlo en 300 millones para finales de 2016, una cantidad que sin embargo sigue siendo inferior a lo que pedían los acreedores internacionales.
- Corrupción: Atenas se propone introducir una nueva ley criminal para la evasión fiscal y en fraude, que acompañará con "otra legislación relevante".



​La crisis griega minuto a minuto





martes, 7 de julio de 2015

Lo que no se sabía de Grecia y a Pablo Iglesias y los de Podemos se les atraganta

Pablo Iglesias (PODEMOS) con Alexis Tsipras (Syriza).
 

Está claro que tiene casi 11 millones de habitantes y poco más

 
Expertos encargados por la unión europea para estudiar las causas que han llevado a Grecia a la presente situación económica; reportan:
Falsearon su contabilidad para entrar en el euro, y luego siguieron falseando su realidad, hasta que la cosa estalló.
Había jubilaciones masivas a los 50 años.
Había 50 conductores por cada coche oficial, de promedio
Había 45 jardineros para una maceta con 4 arbustos en el hospital Evangelismos.
 Tiene la población ficticia más alta del mundo de personas de 110 años porque no se dan de baja los muertos y se cobra su pensión.
 La unión europea ha detectado que hay familias que cobran 4 y 5 pensiones que no les corresponden (no sé porque me acorde de las raticas magistrados colombianos)
 Hay pensiones que se siguen cobrando con muertos que murieron en 1953, hace 62 años.
40.000 señoritas reciben una pensión vi-ta-li-cia de 1.000 euros mensuales por el mero hecho de ser hijas solteras de funcionarios fallecidos y que le cuesta a las arcas del Estado 550 millones de euros al año. Ahora sólo la cobrarán hasta que cumplan 18 años.
Los marcapasos en los hospitales griegos se adquirían a un precio 400 veces superior al que pagan los hospitales británicos.
 En Grecia son numerosos los trabajadores que se han beneficiado de jubilaciones anticipadas fijadas en 50 años en el caso de las mujeres y 55 años (Esta ley fue aprobada por el gobierno socialista de 1978) en el caso de los hombres- por pertenecer a alguna de las 600 categorías laborales consideradas especialmente extenuantes, y entre las que se incluyen los peluqueros (por aquello de que los tintes que utilizan pueden resultar nocivos), músicos de instrumentos de viento (soplar una flauta es agotador) o presentadores de televisión (se supone que los micrófonos provocan daños en la salud).
 Hay miles de chollos, ministerios e institutos inservibles, de los que comen un montón de griegos. Como ejemplo el Instituto para la Protección del Lago Kopais, un lago que se secó en 1930. (1763 griegos son empleados para la protección del lago)
 El fraude fiscal es masivo, más del 25% de los griegos no paga un duro en renta de personas físicas, pero 0, ni descuento ni pago.
 Por otro lado el peso del sector público en la economía es aplastante- Tienen cerca de un millón de funcionarios para 4 millones de griegos de población activa. Ellos hacen como que trabajan y el estado hace como que les paga.
 El salario medio de los empleados de los ferrocarriles públicos griegos supera los 66.000 euros al año. Y esto incluye a limpiadores y otros trabajadores de baja cualificación. El metro de Atenas (casi gratis) recauda unos 90 millones de euros en tickets cada doce meses, mientras que el coste total de esta empresa pública es superior a los 500 millones
 Los franceses reciben de media como pensión un 51% de su último salario, los alemanes un 40%, los norteamericanos un 41% y los japoneses un 34%. Mientras, los jubilados griegos se embolsaban un 96% del total de lo que cobraban trabajando
 En la última década, se han creado más de 300 nuevas empresas públicas
Grecia tiene cuatro veces más profesores que Finlandia, el país que mejor nota sacó en el último Informe PISA, pero esa superpoblación de docentes sólo le ha servido para estar entre los países europeos con peor nivel en casi todas las pruebas educativa y sus profesores junto con los de España y Portugal, que también obtienen resultados lamentables, son después de Luxemburgo los mejor pagados del mundo, los que más absentistas y los que menos alumnos atienden.
La UE ya le perdonó el 60% de la deuda y el otro 40% para empezar a pagarlo dentro de 30 años y quieren que se les preste más y que se les compren bonos basura. A España le deben más de 26 millones de ¤, más lo que nos toca de la deuda de la UE y Mariano Rajoy, creo que con mucha razón, ya les ha dicho que a España no le sobra y que gasten menos y paguen sus deudas y que no esperen que se les dé más dinero.
Por otra parte, lo que proponen aquí "los que dicen que pueden" es que España y la UE les den lo que quieran y que en España se copie el derroche de Grecia y a vivir que son dos días. A Grecia ya se le está marchando todo el capital fuera y si los griegos no renuncian al cuento y se ponen a trabajar, se van a quedar con una mano delante y otra detrás. De donde no hay ni se produce, no se puede sacar. Si España aceptara y copiara el juego griego se hundiría inmediatamente detrás de Grecia. En las próximas elecciones iremos viendo el grado de cordura que aún nos queda.

lunes, 6 de julio de 2015

Dimite Varoufakis. Si Grecia sale del euro, la austeridad tendría que aplicarla Tsipras

Dimite Varoufakis. Si Grecia sale del euro, la austeridad tendría que aplicarla Tsipras

Dimite Varoufakis. Si Grecia sale del euro, la austeridad tendría que aplicarla Tsipras
 

       


    • Tsipras vence en Atenas pero ofrece a Berlín la cabeza de Varoufakis.
    • El titular de Finanzas no ha dimitido, ha sido cesado por el primer ministro.
    • Por tres razones: en primer lugar, por maleducado.
    • En segundo lugar, porque Tsipras ha vencido en Grecia, pero ahora tiene que convencer a Europa.
    • En tercer lugar, porque Tsipras necesita que Europa le “siga obligando” a reducir costes.
    • Merkel es partidaria de que Grecia salga del euro: teme el precedente. Pero Francia no.
    • Bolsa: caída del 2,5% pero enseguida se redujo hasta el 1%.
    • Cuando se anunció el referéndum, el IBEX bajó un 5% y ahora ronda un descenso del 1%.
    • Los mercados siempre tienen los pies fríos y la cabeza caliente.
    Ayer tras el triunfo del ‘no’, la Unión Europea, en especial quien manda en la UE, Alemania, tendrá que decidir si le cierra el grifo del dinero inmediato a Tsipras o no. No sólo es una cuestión económica, es una cuestión política: se teme que si Tsipras le dobla el pulso a Bruselas, el neocomunismo (en España, Podemos) habrá ganado una gran batalla.
    Por lo demás, Alexis Tsipras ha vencido en Atenas pero ha perdido en Bruselas. Le tienen ganas. Por de pronto ha ofrecido a la UE la cabeza de Yanis Varoufakis (en la imagen), su ministro de Finanzas. En primer lugar, por grosero: a los negociadores de la Troika no les ha gustado que les llamara terroristas. Son gente de piel fina.
    En segundo lugar porque Varufakis ha prometido a los griegos que los bancos abrirían a discreción el martes y sabe que eso no será posible en ningún caso. En tercer lugar, porque había que ceder algo ante una Alemania, desgraciada directora de la UE, que ahora está pensando en laminar a Grecia. Merkel y sus coaligados socialistas del Ejecutivo de Berlín quieren a Grecia fuera del euro.
    Y sin duda sería una buena idea, pero el que no quiere volver al dracma es Tsipras. Entonces se verían sus propias vergüenzas. La política de austeridad impuesta no es buena solución, aunque en el caso de Grecia me temo que es obligatoria, pero si va al dracma, Tsipras se quedaría sin excusas para afrontar la política que tiene que aplicar: reducción del enorme Estado griego donde el número de funcionarios debe, no reducirse, sino dividirse por varios enteros. En resumen, el ‘austericidio’ tendría que aplicarlo Tsipras.
    En cualquier caso, Francia no quiere la salida de Grecia y a Reino Unido le preocupa su propia salida.
    ¿Y los temidos mercados financieros? Sólo decir que han bajado un 2%, tras una caída inicial, cuando el IBEX 35 llegó a bajar un 5% el día que se anunció el referéndum. No se fíen de los mercados, son ávaros irracionales incapaces de pensar con un mínimo de frialdad. Los mercados siempre tiene los pies fríos y la cabeza caliente. y el euro ha perdido un 10% respecto al dólar… lo que no tiene porqué resultar negativo.

    miércoles, 1 de julio de 2015

    Las siete lecciones que Syriza quiere darnos a los europeos sobre el desastre de Grecia

    A pesar del desastre, la ultraizquierda griega aún presume de tener la razón

     

     
    La historia de Grecia en las últimas décadas es una nueva demostración -que se añade a la de las dictaduras socialistas- de que un Estado elefantiásico es el mejor camino hacia la ruina.
    A pesar de la evidencia, partidos políticos como Syriza y Podemos han hecho bandera de un expansionismo del Estado y del gasto público, sin aclarar nunca ni explicar de dónde pensaban sacar el dinero para financiar el colosal despilfarro que se deducía de sus programas políticos. Ahora los hechos dejan en evidencia el despropósito que defienden, pero a pesar de ello tanto Syriza como Podemos insisten en aleccionarnos sobre cómo gestionar una economía. Veamos algunas “lecciones” que podemos sacar del desastre griego:
     
    1ª. Gasta más de lo que ingresas, hasta el despilfarro.
    Grecia tiene una larga tradición de gastar más de lo que ingresa. Fue aceptaba en la unión monetaria europea -la zona euro- en el año 2000 con un déficit público del 3,38%, que rebasaba el máximo fijado en un 3% para todos los países. Entre 1995 y 2014 la media del déficit público griego fue del 7,19%, con un pico del 15,7% en 2010, año del primer rescate a Grecia por parte de la UE y el FMI. A comienzos de 2014 el déficit era del 12,3%. Incluso a pesar de los ajustes recientes, el Estado griego sigue sobredimensionado, pero lo peor es que a estas alturas la idea de que “papá Estado” tiene que dártelo todo ya está muy enraizada en la sociedad helena.
     
    2ª. Deja a tus hijos una herencia en forma de deudas.
    En 2002, año de la puesta en circulación del euro, Grecia ya tenía una deuda del 101,7% del PIB. Al comienzo de la crisis, en 2008, ya era del 109,3%. En 2010, cuando se hizo el primer rescate a Grecia, el país ya acumulaba una deuda del 146%. Actualmente ronda el 175%. Las políticas de excesivo gasto público llevadas a cabo por los socialistas del PASOK, por los conservadores de Nueva Democracia y también por la izquierda radical (Syriza) han acabado dejando al Estado griego en quiebra. Todo ello por adherirse a la filosofía keynesiana de vivir de las deudas de forma indefinida y dejando a las generaciones futuras una herencia en forma de pufos.
     
    3ª. Para poder mantener tus despilfarros, pide dinero prestado a tus vecinos.
    El resto de países de la Unión Europea y el FMI han aportado más de 240.000 millones de euros para rescatar a Grecia. La cantidad aportada por España supera los 26.000 millones, un dineral que podría haber servido para aliviar considerablemente la situación en España y que fue comprometido en 2010 y 2011 por el gobierno de Zapatero, que dijo que España ganaría 110 millones al año con esos créditos, algo que no ha ocurrido. Grecia ha seguido manteniendo uno de los gastos militares más elevados de Europa en relación al PIB, y su Estado sigue teniendo una proporción de funcionarios en relación a su población aún mayor que la de España. Un 52% de los hogares helenos tienen una pensión pública como principal fuente de ingresos, algo insostenible para cualquier economía, y más si tenemos en cuenta que los pensionistas griegos se jubilan de media entre los 59 y 60 años (la media europa supera los 64). Hace dos años 11 países de Latinoamérica pidieron al FMI no prestar más dinero a Grecia, ante el convencimiento de que no lo iba a devolver. Gracias a la brillante idea de Zapatero, España es uno de los cuatro países más expuestos de Europa ante una posible quiebra de Grecia, y el tercero en relación a su exposición en relación a sus habitantes. Indiferentes a este peligro para nuestro país, y tras presumir de patriotas, desde Podemos insisten en proponer el impago de la deuda por parte de Grecia.
     
    4ª. Cuando te pidan devolver los préstamos, dales largas.
    El plazo de los rescates a Grecia vencía en diciembre de 2014. Grecia consiguió una prórroga de dos meses hasta febrero de 2015. Luego obtuvo de sus acreedores otra prórroga de cuatro meses que vence esta noche a las 0:00 horas. La deuda griega obtuvo condiciones ventajosas sobre las del resto de países europeos, a pesar de que el Estado griego arrastra un largo historial de morosidad e insolvencia. Después de sucesivas prórrogas, de un par de quitas de la deuda, de pedir agrupar sus pagos y de torear incesantemente a sus acreedores, ayer el gobierno de Syriza anunciaba que no pagará al FMI la cantidad que debía abonarle hoy, un pago que ya había aplazado a comienzos de este mes.
     
    5ª. Pide más dinero prestado para poder pagar tus deudas.
    Con una banca griega en quiebra por culpa del Estado heleno -que se dedicó a colocar su deuda en las entidades financieras de ese país, contribuyendo a su hundimiento-, Grecia no ha cesado de pedir dinero una y otra vez, a pesar de no cumplir los compromisos con sus acreedores.
     
    6ª. Cuando las deudas te asfixien, amenaza con la ruina a tus acreedores.
    Después de alimentarse del dinero prestado por otros países durante años, el 18 de junio una comisión del Parlamento griego consideraba “ilegal, ilegítima y odiosa” la deuda contraida por Grecia desde 2010, es decir, la adquirida con la enorme cantidad de dinero que han comprometido el resto de países europeos y los países donantes del FMI para rescatar a Grecia del desastre una y otra vez. A ese acto de ingratitud y desvergüenza se sumaba ayer un gesto de chulería de Alexis Tsipras: “No creo que quieran echarnos del euro porque el coste para ellos es demasiado grande”. Para colmo de cinismo, el presidente griego añadía: “Tenemos la justicia de nuestro lado”.
     
    7ª. Convoca un referéndum para decidir si pagas tus deudas, y deja claro que no obedecerás el resultado si no es de tu agrado.
    Incapaz de obtener más dinero de sus ya hartos acreedores, el gobierno de Syriza convocó para el 5 de julio un referéndum sobre los términos del acuerdo con el Eurogrupo, a sabiendas de que el último plazo de vencimiento del rescate expiraba cinco días antes. Los fans de Syriza -includos los dirigentes de Podemos- han presentado esta tomadura de pelo como la panacea de la democracia, como si lo democrático fuese que un deudor decida si le da la gana de pagar sus deudas o no. Pero ayer se desvelaba un detalle más de esta mascarada montada por Syriza para ganar tiempo -en vano- y también para cargar a los griegos con las consecuencias de la prepotente actitud mostrada por el gobierno heleno en la negociación: Tsipras anunciaba que respetarán los resultados de la consulta “sean cuales sean”, y acto seguido se desdecía: “los respetaremos pero no los llevaremos a cabo” si triunfa el “sí”. ¡Toma democracia!
    La hoja de ruta ideal hacia la ruina
    Si Syriza y Podemos mostrasen una pizca de honradez, habrían incluido estos siete puntos en sus programas políticos, dejando claro a sus votantes qué es lo que les esperaba si confiaban en esos nostálgicos de la economía planificada. Lo que acabo de exponer, que es la historia reciente de Grecia y el desarrollo de los disparates políticos del populismo más bananero, también es la hoja de ruta ideal para alcanzar la ruina y sumirse en la desgracia, ya sea una persona, una familia o un país entero el que lo haga. Y si a los votantes de Podemos no les basta los ejemplos de Cuba, Argentina, Venezuela y Grecia, pueden ir preparando sus ahorros para otro corralito si deciden poner al demagogo de Pablo Iglesias en La Moncloa.