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sábado, 6 de marzo de 2021

Echenique hace el ridículo en un intento de desprestigiar el uso de la Bandera de España

 

Vinculó a Santiago Abascal con Villarejo por utilizar la Bandera de España

Echenique hace el ridículo en un intento de desprestigiar el uso de la Bandera de España

Uno de los prejuicios más extendidos entre la extrema izquierda es la hispanofobia, y más concretamente el odio a la Bandera que representa a todos los españoles.

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Dos ejemplos de hasta dónde llega la hispanofobia de Echenique

Un buen ejemplo de esa hispanofobia lo tenemos en el portavoz de Podemos en el Congreso de los Diputados. En 2017 Pablo Echenique se puso a difamar a una familia catalana a la que le incendiaron la casa por tener la Bandera de España en su balcón. Sin mostrar ni la más mínima empatía por la familia que sufrió ese cobarde ataque -y sin importarle que en la casa hubiese niños pequeños-, Echenique arremetió contra Rajoy por apoyar a esa familia y contra Antena 3 por dar noticia del ataque. Después, ante la avalancha de críticas contra él, borró los mensajes.

En 2018 Echenique volvió a hacer gala de su hispanofobia saliendo en defensa de Dani Mateo después de que éste se sonase los mocos con la Bandera de España en un programa de La Sexta. En un cínico comentario en Twitter, Echenique escribió: “Yo, la bandera que siento como la de mi país es la rojigualda (respetando y queriendo a quienes sienten la tricolor). Y para mí, Dani Mateo ha respetado mil veces más la bandera que los ladrones del PP”. Nuevamente, depués de la avalancha de críticas que recibió, Echenique borró el mensaje.

Echenique vincula a Abascal con Villarejo por usar la Bandera de España

Anoche, en un nuevo intento de desprestigiar a los españoles que utilizan con normalidad de la Bandera de su Nación, Echenique comparó a Santiago Abascal con el excomisario José Manuel Villarejo por el simple hecho de llevar la Bandera de España en sus mascarillas: “Correlación no es causalidad”, afirmó el portavoz parlamentario de Podemos.

El mensaje de Echenique ha recibido una avalancha de críticas, con casi 900 contestaciones en estos momentos, muchas de ellas burlándose del líder de Podemos por su fobia a la Bandera de España. Algunos internautas le han recordado, por ejemplo, esta foto del socialista Pedro Sánchez, socio de gobierno de Podemos, con la Bandera de España en su mascarilla:

También la socialista Carmen Calvo, vicepresidenta del Gobierno, ha lucido la rojigualda en su mascarilla:

La fobia de Pablo Iglesias a la Bandera y al nombre de España

El que comparte la fobia de Echenique hacia la Bandera Nacional es su jefe de filas. Pablo Iglesias ha llegado a rechazar no sólo la Bandera, sino incluso el mismo nombre de España:

Las banderas que sí le gustan a Pablo Iglesias

Sin embargo, en una gala de su programa “La Tuerka” en 2012, Pablo Iglesias no tuvo inconveniente en fotografiarse con la bandera comunista, que representa a un movimiento totalitario que ha matado a más de 100 millones de personas:

En junio de 2016 Iglesias también exhibió una ikurriña en un mitin de Podemos en Vitoria:

En aquella ocasión incluso besó la bandera inventada por el racista Sabino Arana:

En 2019 el jefe de Podemos no tuvo reparos en exhibir una bandera separatista canaria en un mitin en Las Palmas:

El año pasado, ya como vicepresidente del Gobierno, incluso recibió a embajadores de otros países europeos luciendo la “Wiphala” boliviana, una bandera indigenista muy popular entre la extrema izquierda:

Por lo visto, en Podemos están dispuestos a aceptar cualquier bandera, incluso las más despreciables, antes que la Bandera de España. Qué se lo hagan mirar.

jueves, 4 de marzo de 2021

La hispanofobia de Podemos: quiere que el español ya no sea la lengua común de España

 

Frívola y absurda ocurrencia de la ultraizquierda acomodada en plena crisis

La hispanofobia de Podemos: quiere que el español ya no sea la lengua común de España

Mientras muchos españoles se ven en la ruina, la extrema izquierda acomodada sigue dirigiendo sus esfuerzos a poner España patas arriba.

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Creen que el español es una lengua impuesta en España

Este mediodía Europa Press anunciaba que Podemos y los separatistas presentarán la próxima semana una proposición no de ley que considera que el español es una lengua impuesta en España. No es broma: el partido de Pablo Iglesias y sus aliados proetarras y separatistas consideran que existe una “imposición legal del castellano”. Hay que recordar que esta lengua es la oficial del Estado porque lo dice la Constitución que votaron los españoles en referéndum. Si Podemos y sus amigos quieren modificar eso, tendrán que hacerlo mediante una reforma constitucional, y no con atajos como ése.

Quieren equiparar la lengua nacional con las lenguas regionales

Además, Podemos y los partidos separatistas pretenden que el español y las lenguas regionales gocen “del mismo reconocimiento” y sus hablantes “de los mismos derechos y deberes”. En resumen, que la ultraizquierda y el separatismo quieren que el español deje de ser la lengua común de España, y que nuestra Nación esté obligada a redactarlo todo en cuatro, cinco, seis o siete lenguas diferentes. Un completo disparate propio de quienes tienen como principal bandera ideológica el odio a España y de quienes no parecen tener otro propósito en la vida que ser los palmeros de los separatistas.

Reclaman el mismo «reconocimiento internacional» para el español y las lenguas regionales

Lo más divertido es que también reclaman el “reconocimiento internacional” de las lenguas regionales “en paridad con el castellano”. ¿Y esto no tendrían que pedirlo en las Nacions Unidas? Incentivos tienen, pues últimamente la ONU está abierta a apoyar toda clase de disparates ideológicos procedentes de la izquierda. En todo caso, tendrán que convencer a la comunidad internacional de que el españoluna lengua con 580 millones de personas -483 millones de ellos nativos- y que es oficial en 20 paíseses tan relevante como el gallego, el catalán o el vascuence, que son lenguas regionales españolas.

Los muy cínicos se quejan de la discriminación lingüística

Los promotores de esa iniciativa también exhiben su cinismo al afirmar lo siguiente: “Un Estado debe ser excluyente con todas las discriminaciones, sea cual sea su razón, también la lingüística”. Y esto lo firman partidos que apoyan el Apartheid lingüístico que existe en Cataluña contra los hispanohablantes, que no pueden escolarizar a sus hijos en español en una parte de España: una discriminación dictatorial que viene dándose desde hace décadas.

Pasmosa falta de empatía ante los problemas reales de los españoles

Que haya partidos políticos proponiendo estas majaderías en el Congreso es algo escandaloso. Mientras muchos españoles no llegan a fin de mes y esperan su turno en las colas del hambre, mientras pequeños empresarios y autónomos se ven empujados a la ruina por esos mismos partidos, esos sinvergüenzas que cobran sueldos públicos se dedican a gastar nuestro dinero en proponer burradas para desmembrar España y reducir nuestra democracia a escombros, con una frivolidad que evidencia que ellos no están entre los que se ven en dificultades en el momento actual. ¡Es indignante!

Hace falta ser un psicópata de la política para exhibir esa falta de empatía hacia los españoles que lo están pasando mal, malgastando el dinero que tanto nos cuesta ganar en cosas propias de personas que no tiene ni dos dedos de frente. Ninguno de los promotores de esa iniciativa merece seguir cobrando ni un día más el sueldo público que les pagamos.

sábado, 6 de febrero de 2021

Los hechos históricos que desmienten la leyenda rosa de Podemos sobre Al-Ándalus

 

El partido morado conjuga ese mito con la leyenda negra antiespañola

Los hechos históricos que desmienten la leyenda rosa de Podemos sobre Al-Ándalus

La cristianofobia y la hispanofobia del partido de extrema izquierda están llegando a unos extremos que ya merecen ser calificados como cómicos.

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Hoy, en respuesta a una interpelación de Vox al Gobierno sobre las medidas que piensa adoptar para frenar la invasión migratoria en España, la diputada de Podemos por Sevilla Isabel Franco Carmona hizo una intervención que merece ser calificada como surrealista, ensalzando a Al-Ándalus y acusando a la Monarquía Hispánica de “invasión” y “genocidio”. Podéis verlo aquí:

Al-Ándalus era tan poco armoniosa como la Sudáfrica del Apartheid

Primero, Isabel Franco defendió la típica leyenda rosa sobre el Al-Ándalus bajo el dominio musulmán, abundando en el mito de la convivencia pacífica y en armonía entre tres culturas. Una falsedad histórica que no se sostiene ni por asomo, como ya señaló Pedro Fernández Barbadillo, pues cristianos y judíos eran sistemáticamente discriminados en Al-Ándalus por la casta dirigente musulmana, siendo obligados a pagar más impuestos que los mahometanos.

De hecho, en los siglos posteriores a la invasión musulmana del año 711, los cristianos seguían siendo la población mayoritaria en las zonas bajo dominio islámico, pero esa discriminación, el hecho de poder liberarse de ella abjurando de su fe y también las deportaciones a África fueron medidas de presión para erradicar el Cristianismo, que ya era minoritario en Al-Ándalus en el siglo XI. A partir de ese momento, y por la difícil situación que vivían, empezó una huida de los cristianos y judíos de Al-Ándalus hacia los reinos cristianos del norte. Llamar multiculturalidad y armonía a lo que había en Al-Ándalus es tan absurdo como decir eso sobre el régimen racista del Apartheid en Sudáfrica.

Aún hoy los cristianos sufren persecución en muchos países islámicos

La mejor prueba de la falsedad de esa leyenda rosa es la situación que aún viven hoy en día, en pleno siglo XXI, los cristianos en la mayoría de países musulmanes. El 14 de enero ya señalé aquí que 35 de los 50 países que más persiguen a los cristianos son países islámicos. Entre ellos están naciones como Arabia Saudí, Irán o Sudán, pero también algunas consideradas como más moderadas en Occidente, como Marruecos. Dicho sea de paso, ni Podemos ni la extrema izquierda en general tienen nunca ni una sola palabra de condena contra esa persecución, quizá porque aguaría su narrativa consistente en ensalzar al Islam y atacar al Cristianismo.

Fueron los musulmanes los que invadieron España en el año 711

En cuanto a la leyenda defendida por Isabel Franco, revela el curioso mecanismo ideológico de la extrema izquierda. Para Podemos la invasión musulmana del año 711 y las atrocidades cometidas por los musulmanes en España no merecen ni una mención, tal vez porque el hecho de citar siquiera esa invasión echaría por tierra su leyenda rosa y dejaría en evidencia que aquello no fue una idílica convivencia, sino una ocupación militar.

Según Podemos la Reconquista fue un genocidio pero lo del ISIS no

Eso sí, al mismo tiempo que silencia la invasión musulmana, Podemos llama “invasión” y “genocidio” a la Reconquista: es el colmo del cinismo, sobre todo teniendo en cuenta que en marzo de 2016 Podemos se negó a apoyar una moción Europea que acusaba al ISIS de genocidio por la masacre sistemática de minorías religiosas por ese grupo terrorista. Podemos también votó en contra de la moción del Parlamento Europeo que condenó los genocidios cometidos por el nazismo y el comunismo. ¿Y aún se atreve a hablar de genocidios?

La sangrienta rebelión morisca de las Alpujarras

Hay que recordar, además, que en España permanecieron miles de musulmanes tras la toma de Granada en 1492. De hecho, en 1568 los moriscos se alzaron en la muy virulenta Rebelión de las Alpujarras, una guerra en toda regla en la que los rebeldes incendiaron iglesias y asesinaron a 3.000 cristianos por razón de su fe, con episodios de salvajismo realmente espantosos. Pero incluso a pesar de ese sangriento episodio y de la amenaza de una nueva invasión musulmana -que podría haber contado con el apoyo de los turcos y que podría haber recibido el apoyo de los musulmanes que aún quedaban en España-, la expulsión de los moriscos no se completó hasta el reinado de Felipe III, en 1613.

Imaginemos por un momento cuánto duraría, aún hoy, una minoría cristiana en un país musulmán que se hubiese alzado en armas y hubiese masacrado a 3.000 seguidores de Mahoma por razón de su fe, esperando recibir ayuda de una potencia extranjera que invadiese el país. Hoy en día los cristianos son perseguidos por cualquier minucia en esos países, incluso lo son aquellos musulmanes que deciden convertirse al Cristianismo. Para ellos Podemos nunca tiene ni una palabra de apoyo. Lo que nos faltaba, ahora, es que se dedicase a reescribir la historia para dejarla al gusto de los islamistas.