Una de las principales características del chavismo ha sido el constante acoso a los medios de comunicación opositores e incómodos. Esto no sólo ha sucedido en Venezuela, ya que otros países gobernados por amigos de Chávez también siguieron el mismo camino: en Argentina, Cristina Fernández no ha dejado de enfrentarse al diario Clarín, incluso con la ayuda del Supremo argentino y buscando su desprestigio con ediciones falsas.
En Ecuador, más de lo mismo: Rafael Correa creó una Ley de Comunicación, más conocida como "Ley Mordaza", que ha provocado el cierre de la edición impresa de algunos diarios. La última víctima fue el diario Hoy, que en su momento denunció "la gradual pérdida de las libertades y limitación de las garantías constitucionales que sufre el Ecuador", sumado a "la autocensura que impone la vigencia de la Ley de Comunicación" y "los ataques reiterados directos e indirectos a la prensa que no controla el Gobierno".
En Venezuela, los ataques han estado a la orden del día desde que Hugo Chávez llegó al Palacio de Miraflores en 1999. Y como era de esperar, Nicolás Maduro ha mantenido esa particular política. En los últimos meses, logró "cambiar" la posición de Globovisión, cadena antes conocida como uno de los principales medios opositores. Esto provocó en los siguientes días la renuncia de varios de sus periodistas. Poco después se cerró una polémica venta del diario El Universal, también contrario al chavismo antes de dicha operación.
Pero la estrategia de llevar a los medios contrarios a sus filas se mantiene. El último movimiento ha sido la compra por parte del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) del Diario Vea. Según El Nacional, la negociación se hizo directamente entre con los familiares del fundador del periódico, Guillermo García Ponce. Hace unos días, el primer vicepresidente del partido, Diosdado Cabello, dijo que "tener nuestros propios medios de comunicación es una de las metas para este año. Dios mediante, para los próximos días pudiéramos contar con un periódico, para lo cual ya estamos haciendo todo lo pertinente para que ocurra". Está previsto que el presidente de la Asamblea Nacional tenga en dicho diario –que se relanzará el 23 de noviembre– una columna con el nombre de "Con el mazo dando".
Aunque no se ha informado sobre el monto de la operación, se supo que el chavismo buscará que sus militantes aporten dinero para cerrar la compra con una campaña llamada "un día de salario". El Nacional informó de que la valoración del diario se elevó a 30 millones de bolívares, es decir unos 3,8 millones de euros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario