«Razones políticas» bloquearon fusiones de Cajasur, según un informe de Citi

Citi, un histórico banco internacional -más conocido como Citibank-, acaba de elaborar un informe sobre la situación de las cajas españolas. En él, dedica un apartado a las dos entidades de ahorro que se encuentran intervenidas por el Banco de España: Caja Castilla La Mancha y Cajasur. Y señala que, antes de quedar en manos de la máxima autoridad bancaria, «diferentes soluciones» para la Caja cordobesa con entidades de ahorro de otras regiones fueron bloqueadas por «razones políticas». Es una alusión a la decisión de la Junta de vetar la operación con Caja Murcia.



El epígrafe dedicado a ambas lleva el elocuente título de «Los caídos». En concreto, sobre la Caja cordobesa, este análisis indica que las primeras advertencias del Banco de España llegaron «hace casi 18 meses». No en vano, sigue, la entidad, entonces presidida por Santiago Gómez Sierra, estaba «demasiado expuesta al sector inmobiliario».


El documento apunta que su principal riesgo fue la relación con «los constructores de su ciudad» que la dejaron en «una situación débil». No se puede olvidar que la entidad cordobesa se lanzó al «boom» del ladrillo a fondo, concediendo préstamos y creando promotoras con firmas locales, como Prasa, Arenal 2000 y Noriega.


El análisis sostiene que el Banco de España pidió una solución a Cajasur que «implicaba una fusión con un competidor». Y ahí es donde añade que «diferentes soluciones» para la entidad cordobesa con «cajas de ahorros de varias regiones fueron bloqueadas por razones políticas». Alude al hecho de que la Junta vetara los contactos que tuvo Cajasur para su concentración con Caja Murcia. El Gobierno autonómico posee competencias para impedir uniones extrarregionales, salvo que la caja en cuestión esté intervenida.


Fusión «en Andalucía»


Después, recuerda que una fusión con Unicaja, entidad «también de Andalucía», fue bloqueada por «la falta de voluntad de Cajasur para soportar todas las sinergias de una unión».


Aunque no lo cita el documento, baste recordar que las sinergias a alcanzar sobre costes de personal fue una cuestión que lastró durante meses el proceso de unión. Las dos cajas y los sindicatos no lograron prácticamente avances en cinco meses sobre los recortes de plantilla necesarios. Sí hubo un acercamiento importante en la recta final del diálogo, pero no llegó a plasmarse en un acuerdo laboral por escrito, lo que llevó a la mayoría del consejo de administración de Cajasur a tumbar la fusión el 21 de mayo.


Después de esa decisión, concluye el informe, el Banco de España, «cansado» tras meses de negociaciones que no fructificaron, intervino la Caja cordobesa.
Fuente abc