Que la coordinación entre PSOE y Podemos no es el fuerte del Gobierno de Pedro Sánchez es un hecho suficientemente conocido. Y que en ocasiones el socio morado pone palos en las ruedas de la coalición, a espaldas de los socialistas, también.
Una buena muestra de ambas circunstancias se ha vuelto a producir en las últimas horas con una provocación del partido de Yolanda Díaz y Ione Belarra con un dosier muy delicado y en el momento más inoportuno posible: el de las relaciones con Marruecos.
Justo cuando el ministro de Asuntos Exteriores se afana en recomponer los lazos diplomáticos con Rabat tras la voladura de las relaciones como consecuencia del caso Ghali; y dos días después de que Mohamed VI haya advertido que el respeto a la posición marroquí sobre el Sáhara será fundamental en las relaciones del Reino Alahuita con sus socios comerciales y vecinos estrátegicos, Podemos ha decidido lanzar una nueva provocación al monarca hachemí.
Y lo va a hacer con toda solemnidad en el Congreso de los Diputados, donde se dispone a registrar una inicitiva para exigir al Gobierno que conceda la nacionalidad española a los ciudadanos saharauis nacidos antes del 26 de febrero de 1976, momento en el que el Sáhara dejo de estar bajo la soberanía española.
Pocos discuten que se de recibo ese agradecimiento a los habitantes de la antigua colonia pero todos coinciden en que no parece el mejor momento para desafiar con gestos que pueden ser considerados hostiles por Mohamed VI.
El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en una comparecencia en el Congreso.
Podemos pretende además que los descendientes en primer grado de consanguinidad puedan ser reconocidos como españoles si lo solicitan en un plazo de cinco años. Y que los saharauis con situación legal puedan acceder a la nacionalidad española tras dos años de residencia. Se da la circunstancia de que entre los documentos que España requeriría está el certificado de inscripción en el censo para el referéndum expedido por la ONU y que Marruecos no reconoce y rechaza.
Es más, es su discurso del sábado con motivo del 46 aniversario de la Marcha Verde, Mohamed VI advirtió que la soberanía marroquí del Sáhara es "una verdad inmutable" que deberán reconocer los países que quieran mantener relaciones comerciales con el país árabe. Fuentes diplomáticas reconocen a ESdiario que iniciativas como la que plantea ahora Podemos son "una grave irresponsabilidad".
Además, la propuesta llega después de que en junio de 2020 el Tribunal Supremo dictaminara que haber nacido en el Sáhara Occidental antes de 1975 no daba derecho a la nacionalidad española porque ese territorio nunca había sido nacional, pese a haber sido administrado como una provincia por España.
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