No se crean que el martes 4 hay elecciones autonómicas en Madrid: las hay en toda España
Isabel Díaz Ayuso ha hecho lo que no se atrevió Rajoy, y nos hubiera librado de esta España hosca y crispada, más dos Españas que nunca. Por cierto, para quitar hierro a tanto enfrentamiento, tanta polarización en los extremos y tantas veladas acusaciones, a propósito de los inaceptables y condenables sobres con amenazas de muerte y cartuchos de fusiles de asalto que han recibido Marlaska, Iglesias y la directora general de la Guardia Civil, para aplacar los ánimos me acordaría de la máxima del trovador de Sevilla, de Francisco Palacios ‘El Pali’: «Menos misiles y más pavías de bacalao». Yo ahora diría «Menos cartuchos de fusiles de asalto y más cartuchos de pescado frito». ¿Se imaginan que en vez de amenazas de muerte y municiones recibieran los políticos sobres no anónimos, sino firmados por sus partidarios, con deseos de suerte en las elecciones autonómicas de Madrid del próximo martes día 4 y cartuchos de pescado con las exquisiteces de los freidores de Cádiz y las freidurías de Sevilla, ese cazón en adobo, esos chocos, esas rodajas de merluza?
He dicho elecciones autonómicas y creo que he errado de tiro, ya que estamos hablando de municiones. No se crean eso que dicen que el martes 4 hay elecciones autonómicas en la Comunidad de Madrid: son en España entera. Una vez más, Madrid decide por España. El modelo que salga de esas urnas en plena pandemia, a las que nadie ha puesto el menor reparo sanitario como a las elecciones catalanas, tendrá validez para toda España. Se trata de ver si es posible una especie de ‘señor Sánchez, váyase’ o si se prefiere este Gobierno apoyado en quienes no creen en España y desean al menos acabar con el modelo de concordia del régimen de la Transición salido de la Constitución de 1978. El volantazo de Gabilondo lo dice todo. Quien también iba a perder el sueño si tenía que gobernar con Podemos es eso ahora lo que quiere; esto es, la repetición en la Puerta del Sol, en eso tan bonito de ‘la Real Casa de Correos’, del modelo que nos está gobernando España o lo que sea. Digo ‘o lo que sea’ porque para mí y para muchos españoles gobernar es otra cosa y no encadenar ocurrencias y demagogias, sobre la base del engaño. Y como botón de muestra del engaño, ahí está lo mentado de Gabilondo, de poner a Podemos tras la línea roja a decirle el ‘Vamos a ganar’.
¿Y lo del fascismo, dónde me lo dejan? Sólo les falta decir lo de 1936: «Madrid será la tumba del fascismo». Pensar de otra manera, creer en la libertad y en la separación de poderes, defender la Constitución, ya saben: es fascismo. No hay más democracia que la de los que quieren usarla totalitariamente en nombre de la izquierda. ¿Isabel Díaz Ayuso y Rocío Monasterio? Fascistas y antidemócratas. Los únicos demócratas son los que actúan en fascista para acusar a los demás. Por eso no se crean que las elecciones del 4 son en Madrid. Son en España entera, nos jugamos el futuro por voto de los madrileños. Yo quiero ser madrileño por un día para votar el día 4 por la libertad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario