Los escándalos políticos, judiciales, sociales y diplomáticos, se acumulan de tal manera, que lo que debería ser algo extraordinario, lo que debería ser la excepción, se ha convertido en lo habitual, en la norma de conducta. Llama la poderosamente la atención, como aquellos que vinieron a regenerar la política, aquellos que pretendían darnos lecciones de moral y ética, aquellos que habían venido a limpiar “el país” de corrupción y miseria y de comportamientos poco edificantes, aquellos siempre pendientes de la paja en el ojo ajeno, nunca en el propio, tienen conductas, formas, dichos y hechos que dejan mucho que desear.
La pareja formada entre Irene Montero y Pablo Iglesias, al más viejo estilo rancio y endogámico, ya están colocados en el gobierno de España. El macho alfa, como vice presidente, la hembra, como ministra de igualdad. Chofer, escoltas, asistentes, chalet y sueldos vitalicios, como para no echarse a llorar el día de la investidura de Pedro Sánchez. Estaban más emocionados que el propio presidente del gobierno de España.
Si esta pareja atacó sin piedad a la alcaldesa Ana Botella por ser la mujer de José María Aznar, ex presidente del gobierno de España, ¿qué cabría decir del tándem Iglesias Montero?, sobre todo, después de conocerse la nula preparación de Irene. No dudo de que Ana Botella se convirtiera en alcaldesa por ser la mujer de Aznar, pero existen diferencias notables, que hacen que la situación no sea ni mucho menos comparable. Ana Botella fue alcaldesa de Madrid, por ir segunda en la lista que ganó las elecciones municipales y después de que Alberto Ruiz Gallardón, renunciara a la alcaldía para ser nombrado ministro de Justicia en el primer gobierno de Mariano Rajoy. Cuando Ana Botella fue designada alcaldesa de Madrid, su marido estaba fuera de la política desde hacía ya unos cuantos años ya no ejercía de presidente y nunca la tuvo de compañera en el gabinete.
rene Montero no se resigna a ser mujer florero del macho alfa, no solo es la segunda del partido, una vez que comenzó su relación con Iglesias, además es que no desea ceder todo el protagonismo a su pareja. Lo de menos es la falta de preparación o currículum. No hay nada que no se pueda aprender en dos tardes, como bien sabe José Luis Rodríguez Zapatero.
La duda que muchos españoles tenemos, es ¿si es ministra por su gran preparación y saber estar, o más bien lo es por ser la pareja de Iglesias? Sea lo que fuese, lo cierto, es que en la mayoría de las empresas españolas, no aceptarían un tándem laboral como el formado por Pablo Iglesias e Irene Montero. El principal motivo por lo que esto no está bien visto y en lo que parece no haber reparado el presidente Sánchez, es en el choque de intereses que puede producirse. Lo que es normal para el gobierno de España, sería inaceptable para cualquier gran empresa española.
No tengo muy claro lo que pensara el militante de base de la organización comunista, con el comportamiento endogámico y poco ético de sus líderes. Igual, ese es el motivo del mal resultado electoral y de la pérdida de 10 escaños en pocos meses. He de suponer que los de mayor edad estarán felices y verán en esta pareja muchas similitudes con los Caucescu de Rumanía. De corazón espero, que los Caucescu españoles no acaben como los Caucescu rumanos. Pero entre los más jóvenes, y después de las ácidas criticas que dedicaron a Ana Botella, no sé si su percepción será lo mismo. Lo cierto es que a la pareja Iglesias/Montero poco les deben importar las criticas. Han conseguido meter la cabeza en el gobierno de España, habiendo obtenido el peor resultado de su corta historia. Han pasado de la tienda de campaña, el porro y la litrona, al chalet, el parlamento y ahora la Moncloa. Después de esta legislatura, nada volverá a ser lo que era, como si tienen que dejar la política. Si no tuvieron problemas en la concesión de la actual hipoteca, no creo que los tengan en un futuro próximo. España y los españoles somos así, tiernos y comprensivos o crueles y malvados. Veremos como acaba esta historia de amor, lujo pasión y traiciones…
Javier Garcia Isac/director radioya.es
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