Cuarteles de la Guardia Civil y las residencias de los agentes y sus familias en Cataluña han vuelto a ser objetivo esta madrugada del asedio y las amenazas de los Comités de Defensa de la República (CDR). Se han vuelto a escuchar cánticos como "¡Pim pam pum! Que no quede ni uno" en varios puntos de la región como respuesta a la sentencia del procès.
Valls, Pineda, Calella, Tortosa… las casas-cuartel de la Guardia Civil han vuelto a ser objetivo esta pasada noche de las iras de los radicales separatistas, que han acudido con pancartas y en actitud violenta a rodear las instalaciones. "Ha sido una noche muy larga" explican fuentes de la Guardia Civil destinadas en Cataluña.
Las marchas hacia los cuarteles comenzaron una vez que el llamado ‘Tsunami Democràtic‘, la plataforma que ha organizado la invasión al aeropuerto de El Prat, dio por finalizada la jornada de protestas.
La situación fue muy tensa en Tortosa, donde los violentos entonaron un cántico que resulta especialmente preocupante para los guardias civiles: el "¡Pim pam pum! Que no quede ni uno" que escucharon durante años en el País Vasco y Navarra de boca de los proetarras, y que el separatismo catalán ha recuperado contra ellos.
En el cuartel de Valls (Tarragona) los manifestantes llegaron hasta el mismo perímetro del cuartel vociferando e incluso prendiendo fuego a un contenedor en las inmediaciones. Escenas similares se vivieron en Calella, Pineda y "en general, en toda la región" explican fuentes de la Guardia Civil. También en las proximidades de algunos de los hoteles dispuestos por Interior para alojar a los agentes desplazados ex profeso para el dispositivo post-sentencia.
Los episodios de acoso fueron denunciados por algunas asociaciones profesionales de la Guardia Civil. AproGC, por ejemplo, se preguntaba "¿Qué culpa tienen los Guardias Civiles, y sus familias, de que unas personas incumplan las leyes y hayan sido condenadas?"
Refuerzo de seguridad
El operativo de seguridad se va a reforzar en las próximas horas ante el desarrollo de los acontecimientos. La Guardia Civil ha dado orden de movilizar y enviar a Cataluña cerca de 1.000 agentes pertenecientes a los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) y a las Unidades de Seguridad Ciudadana (USECIC) de toda España. Algunos grupos ya van camino de Barcelona para tratar de contener el caos generado por los CDR en el aeropuerto de El Prat.
Fuentes de la Guardia Civil explican a OKDIARIO que los grupos de GRS de León, Sevilla, Madrid, Valencia y Tenerife han recibido orden de prepararse para desplegarse en Cataluña en las próximas horas. Algunas de las unidades, como la de León, ya van rumbo a la comunidad autónoma tras constatarse el caos que han generado este lunes los CDR tras conocerse la sentencia del procès. Son en total alrededor de 500 agentes.
"Se están activando también a las USESIC", explican fuentes de la Guardia Civil en referencia a las unidades de Seguridad Ciudadana que pueden actuar en momentos delicados como agentes antidisturbios. Son un total de medio millar de efectivos. De Zaragoza también se ha movilizado un MIR (Módulo de Intervención Rápida).
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