Para Pablo Iglesias, el líder de Podemos, el asesinato de los 5 niños de la Casa Cuartel de Vic tiene una justificación política.
También los de Miguel Ángel Blanco, Gregorio Ordóñez, el matrimonio Jiménez-Becerril, Joseba Pagazurtundua…
Las bombas, los tiros en la nuca, las mutilaciones físicas y morales…
¡857 muertos, miles de heridos, secuestrados, extorsionados! Todo el historial de terror de esta banda de asesinos, sus intentos de poner de rodillas al Estado de Derecho y cercenar las libertades constitucionales de los ciudadanos por medio de la violencia más cruel, está justificado en palabras de este individuo que, supuestamente, aspira a gobernar España.
Lo dijo ante las cámaras de televisión, durante su intervención en el Fórum Europa, en el Hotel Ritz, al ser preguntado por un periodista sobre qué relato haría de la banda en el Parlamento Europeo.
“Diría que tiene explicaciones políticas” y que comprenderlas es necesario para "superar los problemas políticos y avanzar hacia soluciones democráticas". Eso fue lo que contestó.
¿Soluciones democráticas? ¿Se refiere a las soluciones democráticas que la violencia de ETA ha pretendido erradicar durante décadas segando la vida de inocentes para imponer su quimera independentista?
Lo más grave no es que el entorno abertzale pretenda blanquear la sanguinaria historia de ETA para que sus crímenes queden impunes. Con esa estrategia ya se cuenta. Lo verdaderamente preocupante es que representantes políticos, como Pablo Iglesias, se muestren “comprensivos” con el origen y mantenimiento del fenómeno terrorista vasco y le presten su apoyo mediático.
Las últimas revelaciones de El Mundo confirman la conexión de Pablo Iglesias con los proetarras. Según la investigación que lleva a cabo la Guardia Civil, ayudó y colaboró con el grupo abertzale Herrira, heredero de Gestoras Pro Amnistía y Askatasuna en la lucha a favor de la excarcelación de presos.
Pablo Iglesias es uno de los contactos de referencia que el colectivo proetarra tiene en Madrid para difundir la idea de “paz por presos”, junto a otros personajes como la diputada de IU por Madrid y pareja de Iglesias Tania Sánchez, y el actor Willy Toledo.
Por tanto, las palabras de Pablo Iglesias justificando políticamente el currículum sangriento de los terroristas entra dentro de esta lógica colaboracionista con el régimen de terror. Su objetivo no es otro que ayudar a construir una España sin vencedores ni vencidos, en la que los verdugos tengan su espacio fuera de las cárceles a costa del silencio y la humillación de las víctimas. Excarcelaciones, libertad, homenajes, subvenciones públicas.
¿Normalización política?
No, llamémoslo por su nombre. El triunfo total de ETA. La victoria de la violencia sobre el Estado de Derecho.
Cero comprensión. Cero justificación. Cero tolerancia con el terrorismo.
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