Subvenciones recibidas por los partidos en 2011 para su funcionamiento ordinario.
Las formaciones presentes en el Congreso se reparten ayudas por casi 20,5 millones.
Gaspar Llamazares es el parlamentario más caro: 456.662,49 euros.
Las formaciones presentes en el Congreso se reparten ayudas por casi 20,5 millones.
Gaspar Llamazares es el parlamentario más caro: 456.662,49 euros.
Foto:Gaspar Llamazares |
Al margen de sus sueldos y complementos, además de las dietas otros gastos, los diputados suponen un importante gasto para los contribuyentes en materia de subvenciones para atender a "los gastos de funcionamiento ordinario" de sus partidos. En concreto, según los datos hechos públicos por el Boletín Oficial del Estado el 11 de octubre de 2011, las formaciones políticas con representación en el Congreso de los Diputados se han repartido este año ayudas por un total de 20.431.322,61 euros en este concepto. En términos absolutos, PP y PSOE son quienes más han ingresado. Sin embargo, el parlamentario más caro en términos proporcionales es Gaspar Llamazares. Cuesta 456.662,49 euros en subvenciones frente a los 57.849,5 euros de media.
El BOE ha publicado la Resolución de 3 de octubre de 2011, de la Dirección General de Política Interior, por la que se publican las subvenciones anuales, para atender los gastos de funcionamiento ordinario, abonadas a las diferentes formaciones políticas con representación en el Congreso de los Diputados, durante el tercer trimestre del ejercicio de 2011. En la misma se concretan las ayudas a cada formación política. Las mayores son para el PP, 8.617.600,14 euros y los socialistas. Entre PSOE y PSC (reciben ayudas por separado) suman 9.586.599,45. Quien menos ha recibido ha sido Nafarroa Bai: 54.281,04 euros.
A la hora de repartir estas subvenciones no sólo se tienen en cuenta el número de diputados, se valoran otras variables como la cantidad de votos obtenida en las últimas elecciones generales. Esto hace que el "coste diputado" por subvenciones para los ciudadanos sea muy diferente en cada formación política. Con una media de 57.849,5 euros, se dispara hasta los 456.662,49 euros de Gaspar Llamazares (único diputado de Izquierda Unida, puesto que Iniciativa per Catalunya-Verds recibe su propia subvención, 121.483,98 euros por su único parlamentario, al margen de la coalición matriz). Por lo elevado de la cifra también destaca la única representante de UPyD, Rosa Díez: 189.687,15 euros.
Los más baratos son los representantes de Convergència Democrática de Catalunya (el destinatario de las ayudas es este partido en vez de la coalición CiU en su conjunto), con un "coste diputado" de 47.188,99 euros en este concepto. Les siguen los parlamentarios de PNV: 47.952,19 euros por cada uno de sus seis escaños. Quienes se sitúan muy próximos a la media son tanto el PP, con un "coste diputado" de 56.649,47 euros y PSOE, con 56.658,32 euros por representante. Su marca catalana, PSC, supone un gasto ligeramente mayor por escaño para los ciudadanos: 57.169,65 euros. Como dato curioso, UPN y el PP de Navarra siguen recibiendo la ayuda de forma conjunta a pesar de haber roto en 2008. Los dos diputados que se reparten entre ambos suponen para los ciudadanos un pago de subvenciones de 56.576,79 euros.
Periodista Digital ha consultado sobre estas subvenciones a César Alonso de los Ríos:
Este mismo dato va a reafirmar en la ciudadanía que tenemos una clase política que no solamente es inútil, a veces corrompida en un grado muy alto, permite corrupciones y participa en ellas, como en la de las cajas de ahorros. Este dato va a acentuar las críticas de los ciudadanos y los políticos van a acusarlo.Los partidos tienen que estar financiados porque forman parte del sistema. Si no existieran, habría una dictadura con un partido único. Y eso lo conocemos muy bien en España. Los partidos tienen que existir. La democracia es la menos mala de los sistemas y hay que financiarla. Todo los demás son fascistadas. Decir que no hay que pagar los partidos políticos o que tienen que desaparecer... en esto no merece la pena ni entrar. El problema es ver si los partidos, al igual que los funcionarios, son honestos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario