Que el asunto no iba de toros era más que evidente. Que el posible sufrimiento del noble animal les importaba una higa, también.
Lo que vetaban era simplemente una tradición llamda "fiesta nacional" y que en todo el mundo se identifica con España. Y prueba de ello es lo que acaba de ocurrir.
Dos meses después de prohibir de las corridas de toros en Cataluña, el Parlamento catalán ha aprobado una proposición de ley que blinda en esta comunidad autónoma española los «correbous».
En Cataluña es tradición celebrar correbous en más de 60 pueblos: la mayoria se celebran en la provincia de Tarragona, en la zona de las Terres de l'Ebre -colindante con Castellón y Teruel-, el dia de la fiesta mayor del pueblo en honor a su santo patrón.
Hay varios tipos de correbous, en función de que los asistentes prefieran un espectáculo basado en el fuego, el agua o la prueba de fuerza:
- El toro de fuego o toro embolado (embolat, en Catalunya): Se inmoviliza al toro atándolo por los cuernos y sujetándolo por las patas y el rabo. Se le ponen unas antorchas o bolas de material inflamable en los cuernos untados con alquitrán y se les prende fuego. Luego se suelta al animal en una plaza o por las calles.
- El toro ensogado (capllaçat, en Catalunya): Se atan unas cuerdas a los cuernos del animal que son arrastrados por las calles llenas de gente.
- Toros al mar: Los animales son perseguidos y acorralados hasta que resbalan y caen al mar o se tiran desesperados a causa de la persecución desde el muelle.
- Los encierros: Los toros, vacas o vaquillas recorren las calles recibiendo golpes de los participantes con palos o varas, hasta que terminan en una plaza donde los animales son capeados o toreados.
LA DOBLE VARA DE MEDIR
La regulación por ley de los requisitos que deben cumplir estos espectáculos ha sido aprobada con 114 votos a favor, 14 en contra y 5 abstenciones, aunque la atención del debate se ha centrado en la diferencia de trato que se da a ambos espectáculos.
Los partidos que forman el Govern han defendido posturas diferentes, ya que el PSC ha vuelto a dar libertad de voto a su s diputados, ERC ha votado a favor e ICV-EUiA en contra, mientras que CiU y PPC han respaldado la propuesta y Ciudadans se ha abstenido.
A pesar de que mantienen posturas antagónicas, el grupo ecosocialista, por una parte, y el PP catalán y Ciutadans, por otra, han coincidido en censurar a CiU y a ERC por la diferencia de criterio y de discurso que a su entender han evidenciado en sólo dos meses de diferencia.
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