(PD).- "Denunciamos esto porque cada vez que Marcello habla con Pepe Oneto se oye un ruido giratorio, como si estuvieran rebobinando la grabadora o algo así". Marcello es el pseudónimo del histórico periodista Pablo Sebastián. "Y lo decimos muy en serio para que tome buena nota de ello la Chacón, que es la jefa del CNI, no vaya a ser que algún listo por su cuenta o bajo sus órdenes esté dedicado a lo que no debe, y a lo que es ilegal".
Marcello este miércoles tira alto. No sería la primera vez que ocurriera en España y el rumor suena ya insistente. En este caso, Pablo Sebastián escribe en Estrella Digital:
"Pueden ser los del CNI con esos barridos aleatorios que le costaron, en su día, a Narcís Serra la dimisión como vicepresidente del Gobierno, o puede que sea un enano infiltrado, o el propio Garzón para seguir la pista de los trajes de Camps, o un espía de Putin o de Obama, vaya usted a saber. Pero de un tiempo a esta parte son muchas las personas conocidas que se quejan en España de extraños ruidos en sus teléfonos móviles. Y lo decimos muy en serio para que tome buena nota de ello la Chacón, que es la jefa del CNI, no vaya a ser que algún listo por su cuenta o bajo sus órdenes esté dedicado a lo que no debe, y a lo que es ilegal".
Y sigue el perro Marcello:
"Y denunciamos esto porque cada vez que Marcello habla con Pepe Oneto se oye un ruido giratorio, como si estuvieran rebobinando la grabadora o algo así. Y eso es intolerable e impropio de una democracia que presume serlo, por más que cada día estamos más lejos de ese ideal. Y si nosotros tenemos los teléfonos pinchados -cuando todavía permanece en el CNI el amigote de Pepe Bono-, lo mismo le puede ocurrir a otros como a José Luis Gutiérrez, el Guti, que ha sufrido la persecución felipista y la del ex Rey de Marruecos y dictador, Hassan II. Porque el Guti, que está en el secreto de muchas cosas -por eso escribe el Erasmo con clave criptográfica- ya sabe mucho de esto de las escuchas, hasta el punto que un día nos aconsejó que para hablar en confianza utilizáramos el sistema del humo y de la manta de los Siux".
Concluye:
"Cuando las cosas van mal, y en España las cosas van mal, mucha gente enloquece y empieza la caza de brujas y los espionajes a todo quisque".
¿Estamos volviendo a los tiempos del peor felipismo?
Por otra parte, el Centro Nacional de Inteligencia siempre ha utilizado a periodistas como espias. ¿Quiénes son ahora los que trabajan para los servicios secretos españoles?
Aunque el último mes parece que están muy concentrados en la captación de "cecilios" entre los concejales de Seguridad -tal y como se ha desvelado en la operación Gürtel-, parece algo más que un rumor que los agentes están entretenidos también entre la profesión periodística
Marcello este miércoles tira alto. No sería la primera vez que ocurriera en España y el rumor suena ya insistente. En este caso, Pablo Sebastián escribe en Estrella Digital:
"Pueden ser los del CNI con esos barridos aleatorios que le costaron, en su día, a Narcís Serra la dimisión como vicepresidente del Gobierno, o puede que sea un enano infiltrado, o el propio Garzón para seguir la pista de los trajes de Camps, o un espía de Putin o de Obama, vaya usted a saber. Pero de un tiempo a esta parte son muchas las personas conocidas que se quejan en España de extraños ruidos en sus teléfonos móviles. Y lo decimos muy en serio para que tome buena nota de ello la Chacón, que es la jefa del CNI, no vaya a ser que algún listo por su cuenta o bajo sus órdenes esté dedicado a lo que no debe, y a lo que es ilegal".
Y sigue el perro Marcello:
"Y denunciamos esto porque cada vez que Marcello habla con Pepe Oneto se oye un ruido giratorio, como si estuvieran rebobinando la grabadora o algo así. Y eso es intolerable e impropio de una democracia que presume serlo, por más que cada día estamos más lejos de ese ideal. Y si nosotros tenemos los teléfonos pinchados -cuando todavía permanece en el CNI el amigote de Pepe Bono-, lo mismo le puede ocurrir a otros como a José Luis Gutiérrez, el Guti, que ha sufrido la persecución felipista y la del ex Rey de Marruecos y dictador, Hassan II. Porque el Guti, que está en el secreto de muchas cosas -por eso escribe el Erasmo con clave criptográfica- ya sabe mucho de esto de las escuchas, hasta el punto que un día nos aconsejó que para hablar en confianza utilizáramos el sistema del humo y de la manta de los Siux".
Concluye:
"Cuando las cosas van mal, y en España las cosas van mal, mucha gente enloquece y empieza la caza de brujas y los espionajes a todo quisque".
¿Estamos volviendo a los tiempos del peor felipismo?
Por otra parte, el Centro Nacional de Inteligencia siempre ha utilizado a periodistas como espias. ¿Quiénes son ahora los que trabajan para los servicios secretos españoles?
Aunque el último mes parece que están muy concentrados en la captación de "cecilios" entre los concejales de Seguridad -tal y como se ha desvelado en la operación Gürtel-, parece algo más que un rumor que los agentes están entretenidos también entre la profesión periodística
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