El indulto a los políticos independentistas condenados por el Tribunal Supremo anulará los años de prisión que les queda por cumplir tanto por el delito de sedición como por el de malversación en el caso de quienes fueron castigados por los dos.

La medida de gracia comunicada ayer por el presidente Pedro Sánchez abarca las penas por los dos delitos, pero eso no afecta a la responsabilidad civil derivada del primero. Se podrá seguir reclamando a los condenados el daño a las arcas públicas que provocaron al impulsar el proceso de independencia de Cataluña en 2017 desde el Govern.