Un juzgado condena a Podemos por manipular elecciones primarias: ¿ya llega Venezuela 2.0?
Una de las formas que ha tenido la extrema izquierda de perpetuarse en el poder en Venezuela ha sido mediante el recurso sistemático al fraude electoral.
Una demanda puesta hace dos años por un miembro de Podemos
Podemos viene actuando desde hace años como la sucursal del chavismo venezolano en España. Y da la casualidad de que anteayer, el Juzgado de Primera Instancia número 89 de Madrid dictó sentencia condenando a Podemos por manipular unas elecciones primarias de ese partido celebradas en 2018 en el municipio de Collado Villalba (Madrid). La demanda contra Podemos fue puesta hace dos años por un militante de esa formación.
El juez señala la falta de secreto y encriptamiento en el proceso
La sentencia (la ha publicado el digital Aquí en la Sierra, se puede leer pulsando aquí) señala que para el proceso electoral Podemos contrató a la empresa nVotes. El texto apunta que la testifical de profesionales de Podemos “coincidió en que los votos de aquel proceso de primarias se encontraban encriptados, y nadie salvo nVotes podía conocerlos, pero es lo cierto que en la sesión antifraude pudo verse en la pantalla de un ordenador el listado de los votos, algunos resaltados en color naranja. No parecen probados, pues, el secreto y el encriptamiento”.
Podemos «podía acceder a la votación y conocer quien había emitido el voto, y a favor de quién»
El Juzgado también señala que un ingeniero informático que es “gestor del programa informático nVotes y encargado de controlar el secreto de las votaciones” declaró que Podemos “podía acceder a la votación y conocer quien había emitido el voto, y a favor de quién”. También apunta que un ingeniero de telecomunicaciones que es coordinador informático estatal de Podemos “declaró que el censo no era inmutable, pudiendo modificarse hasta el mismo momento de votación. Expuso que desde su ordenador portátil él podía acceder en cualquier momento de las votaciones al sistema, y conocer los votos emitidos y sus destinatarios”.
Otro ingeniero informático, representante legal de Ágora Voting, S.L. (que gira en el tráfico mercantil como nVotes), señaló que su empresa ha participado “en entre veinte y treinta procesos electorales” de Podemos, y que nVotes “podía conocer quién había votado, pero no a quien” y que el control de la votación lo ostentaba Podemos, “que podía acceder al canal de participación y tomar conocimiento de los detalles”. Sobre el mecanismo de votación, la sentencia señala que Podemos “controlaba en su portal el censo y la autenticación de los votantes”, en tanto que nVotes “recibía, custodiaba y contaba los votos”.
La denuncia hecha por informáticos de Podemos el pasado verano
El 31 de agosto, el digital Vozpópuli se hizo eco de una carta interna de informáticos de Podemos en la que se señalaba que las primarias de ese partido se fundamentan en cruzar los votos de los inscritos en dos servidores: el interno (llamado “votachachis”) y el externo de la empresa nVotes. La votación se registra en el portal interno de Podemos, y los datos luego pasan a la empresa externa, que los analiza uno a uno para ratificar el resultado.
Los informáticos de Podemos denunciaban en dicha carta, según Vozpópuli, que “el partido invalida antes de la votación a grupos de personas para que, de facto, su voto no quede registrado”, en lo que califican como “un proceso amañado”: “El truco se ejecuta antes de todo. Y no consiste solo en sumar un puñado de votos inscritos en el último día en ese territorio, ni siquiera en restar votos para una u otra razón, sino que consiste en eliminar votantes antes del proceso y sin que ellos lo sepan”.
En las primarias «votaron militantes de otros partidos», entre ellos el PSOE e IU
La sentencia dictada anteayer también señala que en esas elecciones primarias “votaron militantes de otros partidos”, entre ellos miembros del PSOE, Izquierda Unida, Cambiemos Villalba y Vecinos por Collado Villalba. El Juzgado recuerda que la propia normativa de Podemos “prohíbe en cualquier caso que voten en sus primarias militantes de otros partidos no municipalistas, que compitan con él en ámbito nacional”, como es el caso del PSOE y de Izquierda Unida.
Podemos «vulneró el artículo 23.2 de la Constitución, manipulando el resultado de las urnas»
Ante los hechos verificados por el propio Juzgado, el juez acepta la conclusión del Fiscal, que en su informe señaló que Podemos “vulneró el artículo 23.2 de la Constitución, manipulando el resultado de las urnas, no solo controlando el censo y la acreditación de los votantes, sino los tiempos en los que las urnas estaban abiertas, provocando de esa manera la alteración de los resultados”.
Por ello, el juez ha declarado “la nulidad del proceso electoral y los resultados de las elecciones primarias” celebradas por Podemos para las elecciones municipales de 2019 en Collado Villalba, y además, ha condenado a ese partido “al pago de las costas devengadas en el presente proceso”. Teniendo en cuenta lo que señala esta sentencia, lo que ya denunciaron informáticos del propio partido y lo ocurrido en el régimen chavista apoyado por éste, ¿debemos empezar a preocuparnos ante la posibilidad de que algo así se repita en unas elecciones generales, autonómicas o municipales, ahora que Podemos está en el Gobierno?
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