miércoles, 19 de junio de 2019

Campaña de presiones mediáticas para que Vox dé sus votos a cambio de nada



Vox hace lo correcto: es fiel a sus votantes y no regala cheques en blanco a unos trileros

En las últimas horas se han redoblado las presiones mediáticas sobre Vox para que pase por el aro del PP y de Cs, de forma que el partido de Abascal se convierta en un esclavo mudo de ambos.
El pacto de Vox y PP para configurar gobiernos locales y autonómicos
Como ya sabréis, el pasado sábado, de madrugada y sólo unas horas antes de la constitución de los nuevos gobiernos municipales, el PP y Vox firmaron un acuerdo de gobierno. El secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, anunció ese día el objetivo de que VOX tenga representación en todos los gobiernos, en todos los entes municipales, de acuerdo al mandato de los ciudadanos, es decir, de acuerdo al porcentaje de votos y, por tanto, de concejales, que hemos tenido en los ayuntamientos”. Es una aspiración legítima, teniendo en cuenta que Vox es imprescindible para que el PP y Cs puedan hacerse con ciertos gobiernos municipales y autonómicos, y ese apoyo no puede ser gratis.
El precedente de los incumplimientos del PP en Andalucía
Hay que tener en cuenta, además, el precedente de Andalucía: en aras del cordón sanitario impuesto por Ciudadanos a Vox, el partido de Abascal se quedó fuera del gobierno autonómico. Vox firmó un acuerdo con el PP que el PP ya ha traicionado abiertamente varias veces, por el empeño del PP y Cs de mantener el proyecto ideológico del PSOE en lo relativo a cuestiones como la memoria histórica o la ideología de género. Como consecuencia de ello, Vox presentó una enmienda a la totalidad a los presupuestos andaluces, denunciando que dichas cuentas “se alejan mucho de lo que pueda ser el gobierno del cambio” y podrían haber sido presentadas por el PSOE. Vox sólo levantó esa enmienda a la totalidad después de que el PP y Cs firmasen un documento de modificación con los membretes de ambos partidos y de Vox. Fue una demostración de que Vox es fiel a sus votantes y no regala cheques en blanco a nadie. Algo digno de aplauso.
El PP sólo tardó un día en incumplir lo pactado con Vox el sábado
En el caso de los pactos municipales y autonómicos, el PP sólo tardó un día en incumplir lo pactado, dejando a Vox fuera del gobierno municipal de Madrid. En vista de lo ocurrido, Vox suspendió los contactos con el PP, anunciando: “Lo único que estamos haciendo es exigir que se cumpla la parte del contrato que firmamos”. Esta mañana en Onda Madrid, Rocío Monasterio señaló que en el acuerdo suscrito con el PP éste se comprometió a ceder concejalías de gobierno a Vox. Ayer el PP negó haber firmado esa cláusula, pero hoy ha reconocido que sí la firmó tras desvelar Vox el texto del acuerdo, que hablaba de “concejalías de Gobierno y puestos de responsabilidad directiva de entes municipales”. Desde el PP alegan que para hacer referencia a las concejalías de la “Junta de Gobierno” se tendría que haber hecho mención expresa a ésta. Con esta explicación, la dirección del PP demuestra que sigue actuando como un grupo de trileros igual que lo hizo cuando lo presidía Rajoy, que incumplió sus compromisos con sus votantes después de haber logrado una holgada mayoría absoluta, dejando intactas las leyes ideológicas del PSOE.
El PP y Cs han pactado con el PSOE en Ceuta y en Melilla
Obviamente, después de la tomadura de pelo en Andalucía y de la tomadura de pelo en el Ayuntamiento de Madrid -entre otros-, Vox tiene motivos de sobra para ser desconfiado e ir con pies de plomo en relación al PP. Tengamos en cuenta, además, que el PP y Cs acaban de pactar con el PSOE en Ceuta y Melilla, respectivamente, y en el primer caso ignorando a Vox, que fue la segunda fuerza más votada en la primera de esas ciudades autónomas. El caso andaluz ha demostrado que la única forma que tiene Vox de asegurarse de que su apoyo no sirve para hace lo mismo que el PSOE es entrar en los gobiernos de coalición. Si el PP y Cs se resisten a aceptar esa posibilidad es porque les resulta mucho más cómodo, a efectos mediáticos, sostener proyectos ideológicos cada vez más difíciles de distinguir de los que defiende la izquierda. Prueba de ello es la cantidad de ataques que está sufriendo Vox desde todo tipo de medios para que se someta a los dictados del pensamiento único progre como ya hicieron el PP y Cs.
El 27 de mayo era “lógico” pedir cosas a cambio: ahora lo llama “pataletas”
Cuando digo que esos ataques están llegando desde todo tipo de medios me refiero también a algunos que parecían afines. Hoy Federico Jiménez Losantos ha comparado a Vox con Podemos por el mero hecho de negarse a regalar cheques en blanco a unos trileros. A pesar de los incumplimientos de Génova 13, que son el origen de la actual crisis en las negociaciones para configurar el gobierno de la Comunidad de Madrid, en su intervención el presentador de esRadio no ha dedicado ni una sola crítica al PP. En este punto tengo que decir que estoy de acuerdo con lo que dijo Jiménez Losantos el 27 de mayo en una entrevista con Isabel Díaz Ayuso, la candidata del PP a la presidencia de la Comunidad de Madrid:
“Lo lógico es que teniendo la necesidad de los dos apoyos, tanto en el ayuntamiento como en la comunidad, pues pidan cosas a cambio. Esas cosas pueden ser concejalías o pueden ser consejerías”.
Sin embargo, hoy Libertad Digital tacha de “peligrosas pataletas” la posición de firmeza adoptada por Vox ante los incumplimientos del PP, como si la obligación de Vox fuese regalar sus votos a unos trileros a cambio de nada. ¿Qué ha pasado para que lo que era “lógico” el 27 de mayo ahora sea tachado de “peligrosas pataletas”, señor Jiménez Losantos? ¿Acaso se lo debemos atribuir a algún cambio de tendencia ideológica por su parte, como el que ayer le llevó a llamar “grupo ultracatólico” a HazteOir.org, asumiendo así la terminología manipuladora de los medios izquierdistas? ¿O tal vez existen razones más poderosas de las que usted no habla?

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