Ayer vimos en algunos medios, entre ellos en Diario Médico, la foto que le pongo aquí arriba: se trata de la reunión (por cierto, primera de la época Rajoy) del Consejo Interterritorial de Sanidad, o sea, y traducimos, la ministra y los 17 ministrines (y ministrinas, of course) de Sanidad que tenemos en España; cada uno de ellos (y de ellas) con su cohorte de Viceconsejeros, Directores, Subdirectores, asesores, secretarias, coches oficiales con conductor del parque móvil, escoltas, tarjeta visa, buenos sueldos, mejores dietas ... y un largo etcétera.
Tenemos en España 17 calendarios vacunales, 17 tarjetas sanitarias, 17 sistemas informáticos (incompatibles entre sí), 17 modelos de historia clínica, también de imposible interoperabilidad, no 17, sino cientos de problemas "fronterizos" (atención de pacientes de otra autonomía que tienen sus hospitales propios y centros de salud más lejos), 17 carteras de servicios distintas, 17 sistemas de compra de material sanitario (la antítesis de la economía de escala), etc.
Debemos redimensionar el "estado de las autonomías", y, probablemente, devolver competencias a la administración central. En épocas de crisis, cuando el dinero no llega para casi nada (salvo para pagar tantas nóminas insulsas, caras y sin sentido), hay que cambiar los viejos clichés y los reiterativos mantras de los gurús de la redefinición de España de hace 30 años, fallida a lo que se ve.
Tenemos en España 17 calendarios vacunales, 17 tarjetas sanitarias, 17 sistemas informáticos (incompatibles entre sí), 17 modelos de historia clínica, también de imposible interoperabilidad, no 17, sino cientos de problemas "fronterizos" (atención de pacientes de otra autonomía que tienen sus hospitales propios y centros de salud más lejos), 17 carteras de servicios distintas, 17 sistemas de compra de material sanitario (la antítesis de la economía de escala), etc.
Debemos redimensionar el "estado de las autonomías", y, probablemente, devolver competencias a la administración central. En épocas de crisis, cuando el dinero no llega para casi nada (salvo para pagar tantas nóminas insulsas, caras y sin sentido), hay que cambiar los viejos clichés y los reiterativos mantras de los gurús de la redefinición de España de hace 30 años, fallida a lo que se ve.
No hay comentarios:
Publicar un comentario