La puja por la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Córdoba (CajaSur), se calienta. La malagueña Unicaja ha salido a la palestra para responder a la información (“CajaSur, pendiente de la mediación del arzobispo Asenjo ante Griñán”) aparecida ayer en este diario, y desmentir que las conversaciones entre la entidad cordobesa y la Caja que preside Braulio Medel estén paralizadas: “No es verdad que eso esté parado, sino todo lo contrario”, aseguró ayer a este diario un portavoz autorizado de la malagueña.
Para nadie es un secreto que, tras el desgaste que para él supuso el fiasco de la operación Caja Castilla-La Mancha (CCM), Braulio Medel no podía dejar escapar la oportunidad de absorber CajaSur. Fue el propio Medel quien, según las fuentes consultadas por este diario, entró en contacto con Santiago Gómez Sierra, presidente de la cordobesa. Las mismas fuentes, sin embargo, anunciaron días atrás que las conversaciones estaban paradas tanto con Unicaja como con la sevillana Cajasol: “Como entidad fundadora, al Cabildo cordobés no le acaba de satisfacer ninguna de las posibles opciones andaluzas”.
Unicaja (resultado de la fusión previa de las Cajas de Ahorros de Ronda, Cádiz, Almería, Málaga y Antequera) salió ayer al paso de esta versión. “Sí es cierto que ha habido contactos informales y cordiales”, enfatiza el portavoz de Unicaja, “para analizar las posibilidades de una fusión entre ambas entidades, una operación que gozaría del pleno apoyo de la Junta de Andalucía y esto es importante. Por tanto, no es cierto que eso esté parado. Al contrario: sigue muy vivo”.
La Junta andaluza, por boca del consejero de Gobernación, Luis Pizarro, entró ayer de pleno en la polémica para asegurar que “no vamos a apoyar una fusión de CajaSur con Cajamurcia como Gobierno”. En opinión de Pizarro, este tipo de movimientos “no es lo que conviene” al sistema andaluz, para el que defendió la unión de las cajas de la Comunidad con el objetivo de competir con las foráneas. Estamos, pues, ante una toma de posición oficial de la Junta, que aparentemente cierra el paso a cualquier intento de Cajamurcia.
Cajamurcia, su principal competidor
“Lo lógico y natural es que si se abre un proceso de fusión en CajaSur lo protagonice con Unicaja”, prosigue el portavoz malagueño, “porque la entidad resultante se acercaría mucho a los parámetros que el Banco de España considera adecuados, tanto desde el punto de vista de la solvencia como de la capitalización y la capacidad de generación de recursos, por no hablar de las sinergias, y ello por encima de cualquiera de las alternativas que se están barajando”.
Según el citado portavoz, “la facilidad para entendernos entre ambas instituciones es máxima”. No existiría, pues, ninguna pretendida dificultad de Medel para entenderse con la Iglesia. “En los órganos de Gobierno de Unicaja se sienta la Fundación Moctezuma y el propio Obispado de Almería como entidades fundadoras, de modo que tenemos experiencia sobrada para entender las eventuales reivindicaciones del Cabildo cordobés”.
La verdadera competencia de Unicaja en esta operación procedería, según ello, de Cajamurcia. “CajaSol no puede competir con nosotros de ninguna manera. Antonio Pulido no tiene ninguna posibilidad”. Braulio Medel tendría ya diseñado un esquema de operación capaz de salvaguardar en caso de fusión los intereses del Cabildo catedralicio cordobés. “Tenemos una idea muy clara al respecto. Vamos a por todas”.
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