RAFAEL A. AGUILAR
cordoba.abc.es. El hospital de alta resolución que Prasa construirá en el parque tecnológico de Rabanales 21 será pionero no sólo en el equipamiento médico que incorporará, sino también en la forma en la que pretende integrar a todos los médicos que ejercen la actividad privada en la provincia. La intención es que, aparte de los sesenta facultativos que trabajarán de una forma estable en el recinto en proyecto, unos 1.200 médicos cordobeses entren en la red del centro aunque no tengan una vinculación física con él.
Para lograr este objetivo Prasa promoverá un sistema informático inédito en la sanidad privada de Europa similar al Diraya que funciona en el Servicio Andaluz de Salud (SAS), y que centraliza en una base de datos la historia clínica de todos los pacientes, de modo que cualquier médico puede consultarlos antes de ponerle un tratamiento o de intervenir al enfermo.
Antonio Burgueño, que forma junto a Balbino Povedano y Francisco Sánchez de Puerta el equipo facultativo que ha contratado la empresa de José Romero para que idee el hospital, informó a ABC que «la integración de las historias clínicas entre la Atención Primaria y la hospitalaria [o especializada] existe en la sanidad pública, pero no hay en la privada nada que una la consulta del médico con el hospital».
Con la aplicación de este sistema «que será el primero de su tipo en toda Europa en el sector privado, desde la consulta de un médico se podrán pedir pruebas del tipo que sean al centro y que éstas le llegarán a su despacho sin papel».
En este punto, el Balbino Povedano aclaró que «se trata de crear un sistema en el que la historia clínica de un enfermo se pueda hacer en cualquier consulta privada de las que existen en la provincia, de manera que se integre en una base de datos con la privacidad garantizada».
«Esa información -añadió- estará disponible a todos los médicos de familia o especialistas de Córdoba a través del ordenador: es una forma de integrar como médicos del hospital a toda la colegiación de Córdoba». El cálculo que ha hecho el equipo que pergeña el hospital de alta resolución es que en esta red tecnológica podrían integrarse 1.200 facultativos cordobeses.
La pretensión de Prasa es que de esa actividad científica se deriven los datos administrativos de los enfermos en relación con las compañías, con lo que se podrían eliminar los volantes de prescripción, entre otros trámites engorrosos para los clientes. «Se trata de simplificar la atención especializada y que todo sea a través del ordenador», resumió Burgueño.
La referencia de la Cruz Roja
De otro lado, este especialista que ha montado en los últimos años los hospitales privados de más prestigio de España, subrayó que el de Prasa «va a ser un hospital privado pero abierto y no todos los centros sanitarios privados son abiertos». «No va a ser un centro médico del que sólo se beneficien unas determinadas compañías o los amigos de los dueños», apostilló para poner de ejemplo el modelo del Hospital de la Cruz Roja.
Povedano, alma de este último centro, indicó que el de Prasa tendrá «gestión privada, pero será de la colegiación de Córdoba y de los cordobeses». Según el estudio de mercado, el 80 por ciento de los clientes serán beneficiarios de la Seguridad Social.
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