La portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, a su llegada a una rueda de prensa previa a una Junta de Portavoces, en el Congreso de los Diputados.
La portavoz de Junts en el Congreso de los Diputados, Míriam Nogueras, protagonizó este martes un momento sin precedentes en la Cámara Baja. Antes de comparecer ante los medios de comunicación, apartó un metro la bandera de España de su lado y dejó únicamente la europea cerca del atril desde el que iba a hablar. ¿El motivo? “Estaba muy cerca”, dijo.
La enseña de la Unión Europea esa no, esa ha quedado donde estaba, entrando en el tiro de cámara para las televisiones. ¿Por qué? La portavoz de Junts ha alegado que “esta no estaba tan cerca y queda muy chula”, aseguró en tono irónico, y añadió que le representa “mucho más” la de Europa que la de España.
Pues nada. Para mi está muy claro. Esta señora está en su perfecto derecho de situarse al lado de las banderas que quiera, pero si cobra un sueldo no pequeño por formar parte del Congreso de los Diputados, debe acatar las formas. Si no respeta los símbolos de la soberanía nacional, que ponga rumbo a Waterloo con total libertad. Allí le espera Carles Puigdemont. Allí podrá cantar su amor por la Unión Europea e intentar vivir de lo que le paguen sus amadas instituciones europeas.
Es indignante, provocador y ofensivo. Actitudes como estas no deberían quedar impunes porque, insisto, está señora cobra un sueldo que pagamos los españoles. Sus pagadores no merecemos ser ofendidos así.
Pero ya verán como nada sucede. El señor presidente Pedro Sánchez es un rehén del independentismo catalán. Depende de sus votos para seguir en La Moncloa. De ahí que estos individuos vayan por ahí con estas ínfulas y actitudes tan chulescas. No le tienen miedo a nada. Saben que no les van a tocar un pelo, porque pueden chantajear al líder socialista.
Vergonzoso.
Más en twitter: @javierfumero
No hay comentarios:
Publicar un comentario