La defensa de los presos de ERC recomienda que ninguno forme parte del Govern
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El abogado de los exdirigentes encarcelados de ERC, Andreu Van den Eynde, ha considerado recomendable que los presos no formen parte del Govern que tiene la intención de formar el nuevo presidente de la Generalitat, Quim Torra. Para acabar de perfilar el equipo, Torra tiene previsto verse este lunes con todos los encarcelados en distintas prisiones de Madrid, pero el nuevo jefe del Ejecutivo catalán ya ha mostrado públicamente su intención de proponer a los reos su restitución al frente de las respectivas consellerias.
Aunque los exdirigentes de ERC no están por la labor de la restitución y tan sólo los exconsellers Josep Rull y Jordi Turull podrían ser nombrados de nuevo, Van den Eynde ha asegurado que sus clientes no formarán parte del nuevo Govern. Y además ha señalado que “se podría decir que es más recomendable que los presos no formen parte del Govern”, si bien “lo que nos es realmente útil es la certeza de que estás o no estás” en dicho Ejecutivo, para que “el juez no pueda interpretar lo que quiera porque hay incertidumbre”.
De hecho, con el hecho de que ahora haya gobierno, el abogado ha señalado que se da una situación de certeza con la que “pediré la libertad”, también “con la certeza de que mis clientes no formarán parte del Govern”, ha argumentado. Aunque no se ha ahorrado críticas al juez Llarena ni al Tribunal Supremo, al comentar que este tribunal “se está convirtiendo en el túnel del terror”, porque “el mensaje que se da es: ‘no venga (en referencia a los que se han ido al extranjero) porque si viene irá a la cárcel. Si vas, no saldrás”.
Sin embargo, el letrado ha asegurado que el hecho de que Bélgica haya rechazado la euroorden para extraditar a los dirigentes que están en Bruselas “beneficia” a sus clientes: “Los argumentos se adaptan con todo lo que sucede para que los presos no salgan de la prisión”, ha insistido, de manera que el juez está incurriendo en una evidente falta de imparcialidad en su instrucción y en sus decisiones. Así, bajo su criterio, los defectos de la euroorden en el caso de Bélgica son, a su juicio, de fondo y de forma.
Pero esta falta de imparcialidad no hará que la defensa vaya a recusar a Llarena inmediatamente. En este sentido, Van den Eynde no ha querido dar muchas pistas sobre su estrategia de defensa pero ha dejado dos cosas claras: “Nosotros trabajamos por el juicio español pero sobre todo por un juicio internacional”, ha puntualizado, de manera que “en un momento anoté en la libreta 35 vulneraciones de derechos de mis clientes” que “algún día alguien analizará”. Pero no se ha planteado todavía la recusación del juez, y no es que no lo hayan pensado. “Estratégicamente lo tenemos que hacer cuando nos convenga” y “se hará si nos conviene”, de manera que “quizá no convendrá nunca”, ha admitido.
Lo que sí tiene claro el letrado es que “el momento del juicio es crucial” y, dejando los factores personales a un lado y “más allá del pánico escénico”, el juicio “lo debe ver todo el mundo”, ha comentado. “Debemos defender que sea un juicio público, que se pueda ver, e incluso debemos aprovecharlo para introducir toda una serie de modificaciones al sistema judicial español como por ejemplo que se puedan utilizar proyecciones y material audiovisual técnico, algo que ahora es impensable en España”, ha revelado. De esta forma, la defensa tiene la intención de hacer “todo lo posible para que sea el juicio más mediático y técnicamente más avanzado que se haya hecho nunca en España”.
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