Nicolas Maduro deja en la miseria a Venezuela con una inflación del 741%

Maduro deja en la miseria a Venezuela con una inflación del 741%

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, deja en la miseria a los venezolanos con una inflación del 741% para el cierre de 2017. Solo entre enero y febrero, los precios se han disparado un 42,5%.

Las cifras no provienen ni del Fondo Monetario Internacional ni ningún otro organismo ajeno a Venezuela, sino de la propia Asamblea del país, mientras que el Banco Central de Venezuela evita dar esta espeluznante cifra desde hace más de un año.

El presidente de la Comisión de Finanzas del Parlamento, el diputado opositor José Guerra, indicó durante una sesión de la Cámara que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se ubicó en el 20,1% en febrero, superior al 16,7% que registró en enero. Estos datos, según Guerra, sugieren que está ocurriendo una “destrucción de la capacidad adquisitiva de los sueldos, salarios, pensiones y jubilaciones de los venezolanos“, al tiempo que también perjudica los intereses de empresas españolas en el país, como Repsol, que tiene expuesto 2.273 millones de euros.

“Una tasa de inflación de esta magnitud se explica principalmente por el aumento del 275% del dinero nominal emitido por el BCV en lo que va de 2017. Igualmente ha influido en este aumento de precios la depreciación acumulada del bolívar en el mercado paralelo y las expectativas de devaluación del bolívar“, agregó.

Ante la falta de cifras del Banco Central de Venezuela, el Parlamento, controlado por la oposición, decidió crear un índice de inflación usando toda la metodología del BCV. Una metodología que es universal.

La inflación en Venezuela, que según el BCV cerró 2015 en el 180,9%, es un problema inducido por la “guerra económica”, según el Gobierno de Nicolás Maduro, que culpa a empresarios y opositores de la grave crisis que atraviesa la nación petrolera. El Fondo Monetario Internacional (FMI) pronosticó en abril de 2016 que el producto interior bruto (PIB) venezolano se contraería un 8%, después de haberlo hecho un 5,7% en 2015, mientras que la inflación se calculó superior al 480% para el cierre del pasado año. El Banco Central ha guardado silencio desde febrero de 2016 acerca de las cifras oficiales de inflación, PIB o escasez.